El director Luis Estrada contó en entrevista que buscó tener el mismo trato de distribución que Bardo, de Alejandro González Iñárritu, y que al obtener una negativa, optó por pagar los derechos de ¡Que viva México!, cinta que fue rechazada por el Imcine
Agencia Excélsior
CIUDAD DE MÈXICO.
El director Luis Estrada se siente agotado y abrumado de todo lo que ha pasado luego de que se diera a conocer que su película ¡Que viva México! no se estrenaría por el momento en Netflix, ya que busca que su más reciente trabajo tenga primero un recorrido vasto en salas de cine. En entrevista con Excélsior, Estrada cuenta que ha recibido infinidad de llamadas, mensajes, correos de mucho apoyo, así como de distintas distribuidoras que están interesadas en llevar su filme a la pantalla grande. Cuenta también que tuvo que pagarle a Netflix para poder adquirir los derechos de su película —aunque la plataforma continuará con los derechos para exhibirla como parte de su catálogo después del estreno en cines— y respondió, ante lo cuestionado por este medio, sobre si algo tuvo que ver Bardo, de Alejandro González Iñárritu, que tuvo un gran estreno en salas comerciales y no sólo en cines selectos, para después ser exhibida en la plataforma.