Caricaturas que transforman en el Museo del Estanquillo

Una exposición curada por Rafael Barajas reúne obras gráficas, entre dibujos, litografías, óleos, carteles y fotografías

Agencia Excélsior

“Las imágenes poseen una enorme capacidad de contener ideas. Y la caricatura, en particular, puede ser la vanguardia de la transformación de la sociedad”, afirma el investigador y caricaturista Rafael Barajas El Fisgón.

Tras décadas de estudiar la evolución de este arte, el también coleccionista arma una exposición con su acervo, cuyo eje temático es que las revistas de caricatura fueron las precursoras directas de la Revolución mexicana.

Caricatura y revolución. Los Flores Magón y las revistas satíricas de combate, que reúne 500 obras de artistas nacionales e internacionales, entre óleos, dibujos, litografías, grabados en metal, carteles, libros y fotografías, se exhibe en el Museo del Estanquillo como primera muestra del año.

“Se presentan varios periodos. Primero, hay unos antecedentes que te explican el origen de la caricatura política en México, cómo se consolida en el país la caricatura de combate y cómo de ésta surge una rama antiporfirista, que empieza siendo liberal y termina siendo socialista, y que está en el origen de la Revolución”, detalla durante un recorrido por la exposición.

El ilustrador explica que “el relato oficial te dice que la Revolución mexicana empieza el 20 de noviembre de 1910; eso no tiene sentido. Es decir, la Revolución mexicana inicia de hecho en 1906, con el programa del Partido Liberal Mexicano, con las primeras insurrecciones maderistas.

“Sin embargo, la conciencia social se despierta a finales del siglo XIX. La caricatura mexicana de combate fue una de las principales herramientas del mundo liberal contra los conservadores”, dice.

Destaca que “la primera vanguardia artística de alcances importantes que se dio en occidente fue precisamente la revista La Caricature, que publicó Charles en Francia, Philipon
en 1830.

“En México, este proyecto de vanguardia francés adquiere una identidad propia, unas lógicas propias y termina derrocando a la dictadura de Porfirio Díaz. Fue un proyecto artístico político y cultural”.

El promotor señala, en entrevista al final del recorrido, que “la Constitución Mexicana de 1917 es la primera que consagra los derechos sociales; es decir, la jornada laboral de ocho horas, el salario mínimo suficiente, el derecho a vacaciones, el reparto agrario.

“Y, meses después de que se firma la Constitución del 17, los bolcheviques en Rusia aprueban una constitución con derechos similares. Aquí, el tema de fondo es lo que leían: los bolcheviques, escritos de Marx, Engels, Lenin, Trotsky o de Rosa Luxemburgo. Y los revolucionarios mexicanos leían El Hijo del Ahuizote. Cómo te explicas que de una revista de caricaturas hayan surgido puntos tan similares”, añade.

Barajas admite que éste “es un material de importancia histórica no sólo para México, sino para el mundo, porque te habla de cómo se consolida la primera revolución social del planeta”. 

El dato

Sábado, inauguración

Caricatura y revolución. Los Flores Magón y las revistas satíricas de combate, en el Museo del Estanquillo. 

En cuanto a la evolución de la caricatura política en México, dice que “se mantienen ciertas lógicas, pero ha tenido variaciones estilísticas, han cambiado de objetivo político. Pero aquí, lo que se consolidó fue la caricatura política de combate y es una tradición que sigue viva hoy en los trabajos de los caricaturistas que están activos.

“Esta tradición de gráfica política siguió viva en los muralistas mexicanos, en los integrantes del Taller de la Gráfica Popular, en las publicaciones de caricaturas de Alberto Beltrán, en las historietas de Rius, en las caricaturas de Rogelio Naranjo”, indica.

La exposición, que se despliega en dos pisos del museo, sorprende con estampas de Los proverbios de Goya; ilustraciones de las revistas El Ahuizote, El Hijo del Ahuizote y El Ahuizote Jacobino, litografías de Leopoldo Méndez y Alfredo Zalce, y obra gráfica de Rivera, Siqueiros y Clemente Orozco; así como caricaturas de artistas de finales del siglo XIX y principios del XX.

Caricatura y revolución. Los Flores Magón y las revistas satíricas de combate se inaugurará mañana, a las 13:00 horas, en el Museo del Estanquillo, y permanecerá abierta hasta abril próximo.