ENTRELÍNEAS 15/06/17

Políticos represores

Por Jorge Ceballos

Apenas el pasado jueves todo era felicitaciones y en algunos casos, festejos por conmemorarse el Día de la Libertad de Expresión. En muchos casos algunos “comunicadores” se dieron gusto transmitiendo y publicando imágenes de los encuentros que tuvieron con alguno que otro actor político en la entidad: hipocresía vil y barata.

 

Éste martes 13, los reporteros y ciudadanos nos enteramos de la demanda que interpuso la legisladora del PRI, María Jesús Olvera Mejía en contra del reportero Silvano Bautista, a quien además le reclama la cantidad de cinco millones de pesos, por presunto daño moral, al exhibir en un material periodístico publicado en octubre de 2016, la existencia de algunos expedientes que involucran a la parlamentaria.

De inmediato la respuesta de la mayoría de los comunicadores de Tuxtla Gutiérrez no se hizo esperar, alzaron la voz. Se manifestaron en el Congreso del Estado, lugar en el que debería de despachar la legisladora, vaya, hicieron ruido por la demanda interpuesta contra el compañero Silvano Bautista.

En plena sesión del Congreso del Estado, los reporteros exigieron un alto al intento de represión de la también líder cetemista, la cual dicho sea de paso, se ha dado gusto al amparo del poder.

Exigir cinco millones de pesos, demuestra la voracidad que tiene María de Jesús Olvera, porque si quisiera lavar su nombre, lo menos que pediría sería una disculpa pública en caso de que pudiera existir un acto doloso de parte de Silvano al dar a conocer los números de expedientes que existen en contra de la priista, sin embargo, el material periodístico, parten de algo oficial, no se está inventando nada.

En su publicación de octubre de 2016, Silvano Bautista da a conocer el historial delictivo que acompaña como sombra a la mujer ligada fuertemente al PRI, se basó en hechos y testimonios que están asentados en averiguaciones previas.

Olvera Mejía como todo personaje represor, se sintió agredida porque se le sacaron los trapos al sol en época de lluvias.

Demandar el pago de cinco millones de pesos de un reportero, resulta loco, porque demuestra que la legisladora no tiene en cuenta los bajos salarios que se obtienen por realizar un trabajo de mucho riesgo, peor aún, demuestra que su interés en su paso por la política va acompañado por la ambición al dinero fácil.

Quienes asesoraron a la legisladora de presentar una demanda en contra de Silvano, muestran la realidad que persiguen, buscan acallar a las voces críticas, quieren tapar el sol con un dedo y eso sí que no se puede.

A raíz de la demanda interpuesta contra el compañero reportero, sirvió además para conocer que María de Jesús Olvera Mejía, como vil delincuente utiliza dos actas de nacimiento, así como dos CURP, algo que también es un delito.

Independientemente del material periodístico que dio origen a la demanda, no se puede dejar pasar por alto que los ciudadanos están representados por personajes siniestros, delincuentes vestidos con ropa de marca.

Al principio les comentaba de las hipócritas celebraciones de la semana pasada, vileza disfrazada de camaradería, porque estamos casi seguros que muchos de los que se desvivieron en felicitar a los comunicadores, ya sabían de esta embestida contra Silvano Bautista.

Muchos criticarán mi actitud hacia ese tipo de celebraciones banales, porque pensarán que estoy amargado, lo que sucede es que de la clase política y gobernante no se puede esperar nada sincero: todo lo ven de acuerdo a sus intereses, de ahí que reprobamos esa clase de reuniones.

La demanda en contra de Silvano, debe servir para demostrarles a los políticos la unidad que prevalece en un gremio en el que muchas veces estamos todos contra todos, pero tampoco dudo que existan Judas que se hayan ido a poner a la orden de quien demanda con tal de ganarse unos pesos.

Luego de la manifestación en el salón de plenos del Congreso del Estado, hubo una comisión de diputados encabezada por Carlos Penagos que recibió a varios comunicadores, escucharon las peticiones de que María de Jesús Olvera Mejía retire la demanda, como si eso fuera a remediar en algo el intento de represión.

Un paliducho Hugo Mauricio Pérez Anzueto, coordinador de los diputados del PRI, solo lograba articular que su partido, no respaldaba las acciones emprendidas por María de Jesús Olvera, algo que dudamos. 

Lejos de exigir el retiro de la demanda y de escuchar que el PRI no comparte esas acciones, los legisladores locales de todos los partidos, si es que en ellos cabe la prudencia, deberían llamar a cuentas a Olvera Mejía, de una vez por todas ponerle un alto y qué como cualquier persona, enfrente los procesos abiertos por la comisión de varios delitos.

¿En qué ayuda a los ciudadanos tener representantes con señalamientos en investigaciones penales? Ahora falta que el próximo año, en la repartición de las candidaturas plurinominales, aparezca el nombre de María de Jesús Olvera Mejía, para que siga amedrentando a quienes la critiquen, pero sobre todo haciendo desmanes a su antojo.