SEÑOR PRESIDENTE POR FIN LA CUARTA TRANSFORMACIÓN SE ESTÁ NOTANDO

Por Mtro. Julio César Cué Busto 

Cuando se empezaba inquietar parte de la población ante la falta de señales que indicaran una implementación de la Cuarta Transformación (CT), el Lic. Andrés Manuel López Obrador, modifica su forma de contestar preguntas en las mañaneras; así como, en la exposición de ideas y consideraciones; esto es, sube cuatro rayitas a sus declaraciones y logra encender de nueva cuenta la llama de la esperanza que en México sí pueden cambiar las cosas.

 

Últimamente AMLO de forma más “ruda” ha dado puntual respuesta a prácticamente todos los cuestionamientos que le hacen en sus giras y conferencias matutinas, y aunque a la par envía constantes mensajes de amor y paz a las fuerzas representativas del Antiguo Régimen (AR), ha reiterado una y otra vez que el pueblo decidirá los encauses de la lucha contra la corrupción, y que los actuales instrumentos creados por los Neoliberales para supuestamente combatir el mal gobierno, no han tenido a la fecha ninguna utilidad.

Toda acción gubernamental en esta administración federal tiene una lentitud desesperante, pero se debe de entender y comprender que no hay de otra, la CT se enfrenta a un monstruo de mil cabezas en donde el verdadero reto es seguir convenciendo al pueblo de México de la urgente necesidad de depurar las instituciones creadas por el AR, que son las principales responsables de la situación inaceptable de inseguridad pública e impunidad que padecemos en el territorio nacional.

Para lograr lo anterior, se requiere se concrete una reingeniería total de las estructuras gubernamentales, fundada y motivada ésta en base a la recomposición del desastroso Universo Jurídico Nacional, para su modernización y eliminación de preceptos inventados para sostener un asfixiante, pesada y anacrónica administración pública nacional.

Se le reconoce al actual presidente que, con una entereza sorprendente identifica a plenitud todas aquellas instituciones que se crearon con una aparente justificación sana, pero que al final sólo fueron, son y serán un homenaje patético a lo más representativo del gatopardismo. Nombraremos sólo tres: la Comisión Nacional de Derechos Humanos; Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información, y Protección de datos personales; y el Sistema Nacional Anticorrupción.

Aunque en el caldo de cultivo de la realidad cotidiana, tal pareciera que el enfrentamiento del Lic. López Obrador con los Neoliberales representantes genuinos del AR, será eterno e indescifrables sus consecuencias y resultados; ya que, los adversarios, detractores y no-simpatizantes de AMLO con singular encono y sin perder una micra de intencionalidad continúan en la campaña difamatoria y calumniosa, sostenida principalmente con puras Fake News.

Otra situación muy válida de comentar es que vemos al presidente de México muy solitario, aunque esté rodeado de su gabinete, solamente lo ve uno muy arropado cuando lo escoltan los secretarios de la Defensa Nacional y de Marina. Los héroes en nuestro país no existen, somos por cultura adoradores de lo que se pudiera llamar “fraudes preconcebidos”, que en la mayoría de las ocasiones la fama de algún personaje nacional la crea, promociona y protege, el mismo destinatario; Esto es, nos hacen creer en capacidades inexistentes.

Considero que las generaciones antiguas, actuales y futuras, de miembros representativos del saber que pululan en la república mexicana, salvo raras excepciones, la gran mayoría adolece de los conocimientos y experiencia, que se requieren para enderezar los rumbos de la nación.

Me voy a arrepentir seguramente de lo que a continuación expondré, pero lo considero indispensable, lamentablemente, casi en la totalidad de las fuerzas vivas de los Estados Unidos Mexicanos, sobresale la ignorancia, la pendejez, la desidia, la deshonestidad, el valemadrismo y una que otra lindeza de similar calibre, reinan todas éstas de manera permanente en nuestro país.

Lo anterior permite, que se encuentren muy arraigados en la vida nacional a los que llamé “Fraudes Preconcebidos”; estos idiotas bullen por todas partes. Alguien tendrá alguna duda de las incapacidades de Peña Nieto, Vicente Fox, o de Javier Duarte, son unos imbéciles, y se encumbraron, porque algún malévolo personaje creyó poderlos controlar y los protegió e impulso. Estos “fraudes preconcebidos” pululan en el gabinete del actual gobierno, en las cámaras legislativas, o en cualquier nivel de gobierno de las Entidades Federativas. 

Esta es la triste realidad de México, y con eso hay que trabajar, en mi trayectoria dentro del servicio público vi quizás en demasiadas ocasiones ejemplos de esto último que expongo, se requiere un pleno examen de conciencia para cuando se realicen designaciones de puestos gubernativos, no recaigan estos en personas (fraudes preconcebidos) de muy dudosas capacidades o simple y llanamente en súper bandidos de fama muy reconocida y pública.