LA DESGRACIA QUE PADECE MÉXICO

"Es por su incalculable inseguridad pública y descomunal impunidad" 

Por Mtro. Julio César Cué Busto 

La población en general sufre estos dos males provocados por la alta corrupción que impera a nivel nacional en el personal policial preventivo y de investigación, en los agentes del ministerio público, en jueces y magistrados, abarcando los fueros federal y común; así como, en una proporción mínima las Fuerzas Armadas.  Pero se ignora en base a un cálculo riguroso nacional el grado de contaminación de las instituciones de seguridad y justicia, y mucho menos los casos de corrupción de los militares, tradicionales por su hermetismo.

 

Sólo se sabe con una aparente certeza, que las corporaciones más corruptas son las policías preventivas municipales, y el área menos contaminada la castrense. Cuando el Lic. Andrés Manuel López Obrador estaba en calidad de presidente electo y se entrevistó con el anterior Secretario de la Defensa Nacional fue informado con toda puntualidad de la desgracia de México por su inseguridad pública e impunidad reinante.

Se comprende entonces por qué el ya ejecutivo federal cambió de opinión sobre el retiro de las Fuerzas Armadas en tareas de seguridad pública; ya que, al ser advertido de los verdaderos niveles de contaminación de las policías en general de México, dio marcha atrás en la promesa de regresar a los soldados a sus cuarteles.

Quedando en el entendido que la opción militar era la única viable para intentar lograr la tan ansiada pacificación del país, recordemos que la Secretaría de la Defensa Nacional tiene infiltradas a casi todas las agrupaciones delictivas del crimen organizado por medio de sus áreas de inteligencia, que incluso en el grupo de los 43 de Ayotzinapa había un soldado infiltrado de informante; o sea, la información que maneja la SEDENA es sin duda, altamente confiable.

Otra situación fácilmente deducible es que con plena conciencia patriótica las Fuerzas Armadas ante la situación desastrosa de la seguridad pública en México tomaron medidas preventivas desde el sexenio anterior; ya que, al aumentar, sin necesidad aparente, de manera significativa el personal de policías castrenses, tuvieron la oportunidad para ofrecerle al presidente entrante alrededor de 35,000 mil elementos de la Policía Militar y 8,000 de la Policía Naval para la Guardia Nacional.

La innegable herencia del Antiguo Régimen en materia de inseguridad pública e impunidad es muchísimo más grande de lo que se reconoce públicamente. Resulta natural el consecuente análisis, este caldo de cultivo contiene principalmente: Los anacrónicos medios de comunicación tradicionales; las fuerzas más representativas del llamado neoliberalismo (amalgamadas las económicas y las políticas); los sicarios opinólogos vendidos al mejor postor… .

Continuando, los tontejos antiamlos convencidos por las fake news, que sin aportar nada, sólo se dedican a reenviar notas de la prensa fifí y de los opinólogos neófitos de su propio tema; el grupo mayoritario nacional del hartazgo; el universo del crimen organizado o eventual; las Fuerzas Armadas; las ONG altamente contaminadas por la corrupción; las redes sociales; el grupo político en el poder; y, el Presidente de la República actual y su gabinete, entre otros.

Siguiendo con la deducción se pudiera concluir que son muy respetables y justificados los objetivos del señor presidente en cuanto a la reconciliación nacional, la estrategia del punto final, y el abatimiento de la corrupción de manera total, pero ante lo complicado de esos retos, las preguntas son, ¿quiénes se van a rendir? el Lic. Andrés Manuel López Obrador, considero que nunca, la razón está de su lado, lo único que busca nuestro presidente es el bien común. ¿Los detractores antiamlo se rendirán? lamentablemente la respuesta a esto último también es no.

¿Qué hacer entonces? una insistir un poco más en los arreglos amistosos, otra, ya ir preparando el plan "B", que pudiera consistir en combatir a los enemigos del pueblo en forma seria y oportuna, exigirles a los gobernadores y presidentes municipales que limpien sus instituciones policiales y hacer pública toda la información relativa a la corrupción actual del servicio público, entre otras acciones.

Una realidad que habrá que reconocer con su tiempo es que los adversarios nunca van a colaborar con un gobierno que tiene todas las pruebas para meterlos a la cárcel, con referencia a los antiamlos es tan bajo su nivel de nivel de comprensión que continúan insistiendo en idioteces como el aeropuerto de Texcoco, refinería Dos Bocas o el aeropuerto de Santa Lucia.

Todo lo expuesto es dicho con todo respeto y la parte acre es únicamente con la finalidad que observen que mal me veo agrediendo a los detractores de Amlo, estimados camaradas, público en general respeten al señor presidente, ese respeto se lo ha ganado plenamente.