HOSPITAL DEL ALMA 291118

 

Por El Duque de Santo Ton

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Querido Duque de Santo Ton:

Una ex compañera de la universidad, en lugar de casarse, se dedicó a estudiar y a estudiar y ahora tiene dos maestrías y parece que va a quedar muy bien parada en la Cuarta Transformación.

Obviamente se conserva en línea, es elegantísima, se la pasa coge y coge con quien se le antoja, hace lo que quiere, viaja a Europa dos veces por año, pero no tiene lo más importante: una familia como la mía.

Ana Laura

Tuxtla Gutiérrez 

Querida Ana Laura:

Pobre de tu ex compañera, eso de limpiar niños cagados y soportar maridos borrachos debe ser muy padre. 

Duque de Santo Ton:

Mi tía es poeta y ha recibido muchos reconocimientos, además de que ha escrito libros que ya se tradujeron a varios idiomas. Sin embargo, nadie los compra, todos los imprime el gobierno y muchas veces terminan siendo vendidos para reciclar el papel. Yo me pregunto cuál es el verdadero talento que tiene mi tía, si nadie compra sus libros.

Alan

Tuxtla Gutiérrez 

Querido Alan:

El verdadero talento de tu tía consiste en relacionarse con los influyentes y promover las virtudes que no tiene ni tendrá. Los buenos escritores nacen, no se hacen ni tocándole las pelotas a quienes ya sabemos.

Duque:

Siento en ti toda la rabia de un hombre frustrado y resentido con la sociedad. Deberías ser más positivo y canalizar tus energías hacia lugares menos autodestructivos.

Donovan

Tuxtla Gutiérrez 

Querido Donovan:

Autodestructiva será tu abuela. 

 Querido Duque:

Desde que tengo uso de razón, mi papá siempre ha tenido broncas de dinero, y aunque nunca había un peso en la casa, la verdad es que nunca nos faltó comida, ni ropa, ni escuela. Ahora acabo de cumplir los 18 y dicen que soy bonita (eso dicen), y aunque realmente quiero a mi padre, no deja de parecerme patético que trata de “venderme” con un amigo millonario que tiene. Lo invita a la casa y trata de que él y yo nos quedemos solos o le pide que me lleve al cine o a pasear. El hombre no es feo y realmente tiene dinero, pero yo no soy ninguna muerta de hambre que vaya a terminar en la  cama o dejándose tocar por un señor a cambio de que mi papá consiga favores.

Sandy

Tuxtla Gutiérrez 

 Querida Sandy:

Realmente es patético tu padre. 

Duque:

¿Podrías decirme quién fue Aristóteles Onassis? ¿Por qué es tan famoso?

Amalia

San Cristóbal 

Querida Amalia:

En el verano de 1955, los aristócratas, millonarios y reyes sin corona doraban su humanidad en el balneario de “La Condomine” en el principado de Mónaco, cuando vieron una fabulosa embarcación blanca con chimenea amarilla y bandera griega: el yate “Cristina”, del multimillonario Aristóteles Sócrates Onassis, hacía su entrada triunfal en la ribera monegasca. El griego no llegaba con las manos vacías, bien lo sabía el príncipe Rainiero que le dio una cordial bienvenida a su huésped. La fastuosa vida de “Ari” y las macrofiestas organizadas por él mismo, despertaron el interés de artistas y celebridades que se daban cita en uno de sus más lujosos yates, el Cristina. Pero además de fiestas, el magnate hacía regios negocios; hasta llegó a comprar el 52% de las acciones de la “Societé des Bains de Mer” convirtiéndose prácticamente en dueño del casino. Asimismo comenzó a circular el rumor que la empresa petrolera del acaudalado griego adoptaría la bandera de Mónaco, con lo cual no pagaría impuestos. El comentario llegó al propio general De Gaulle, desencadenando un conflicto internacional que le hiciera manifestar que la “Olympic Maritime” -compañía naviera de Onassis- dejaba una fortuna en impuestos, y no eludiría tan fácilmente las arcas francesas. La estrecha relación entre el millonario griego y “sus altezas Serenísimas” se enfrió rápidamente. Rainiero amenazó incluso con nacionalizar el casino, pero “del dicho al hecho hay mucho trecho” y reinar en un principado como Mónaco tiene muchas limitaciones. Conflictos familiares, su amasiato con Maria Callas, la mejor cantante del mundo; y su matrimonio con Jacqueline Bouvier Kennedy, la mujer más cara del mundo, hicieron el resto. 

Querido Duque de Santo Ton:

¿Podrías decirme qué son los pedos? Ya terminé la preparatoria y jamás  tratamos el tema en ninguno de los cursos de biología. Parece mentira que algo tan cotidiano no tenga para mí explicación.

Natalia

Tuxtla Gutiérrez 

Querida Natalia:

Flato es el nombre menos vulgar de un pedo, y la palabra deviene del latín flatus, que significa soplo. Es un compuesto de gases altamente variable, expelido a través el ano. Está formado por parte del aire que respiramos, y está casi compuesto          exclusivamente de nitrógeno y dióxido de carbono. Una vez que el organismo absorbe oxígeno, los gases resultantes de las reacciones químicas entre los ácidos estomacales, fluidos intestinales y flora microbiana producen: dióxido de carbono, hidrógeno y metano. Ahora bien, el olor de los pedos proviene de pequeñas cantidades de Sulfuro de Hidrógeno (gas sulfhídrico) y Azufre libre en la mezcla.  Cuanto más rica en Azufre es tu dieta, más de esos gases van a ser producidos por las bacterias en tu intestino, y más hediondos serán tus pedos. Alimentos como cebolla, coliflor, frijoles, huevos y hongos son notables por producir pedos repugnantemente apestosos. 

Duque:

Yo sé que tú puedes sacarme de una duda ¿sabes cuál es la tela a la que se le llama “príncipe de Gales”. La otra noche, en una fiesta, me hice como el que sabía, pero no tengo ni idea.

Federico

Tuxtla Gutiérrez 

Querido Federico:

Curiosamente hace años, en una fiesta a la que fui en Barcelona, España, sorprendí a quienes quisieron oírme, con una pequeña explicación del tema. Se trata de un estampado inglés, que se popularizó mucho a mediados del siglo XX. Actualmente, los cuadros príncipe de Gales se han convertido en un estampado clásico de distintas prendas del vestuario masculino. Se trata de un tipo de dibujo, consistente en cuadros de color superpuestos a otros cuadros de la misma gama aunque en distintas frecuencias de tono. Una de sus características más importantes, además de su elegancia, es que las manchas son difícilmente perceptibles. Los trajes príncipe de Gales son una elección muy acertada, siendo muy popular entre los hombres de negocios, si bien no son aptos para ciertas ocasiones formales como bodas o reuniones nocturnas, más bien se usan de día. No sólo existen trajes con este estampado, también hay camisas, corbatas y chalecos.