HOSPITAL DEL ALMA 25/04/17

Por El Duque de Santo Ton

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Querido Duque de Santo Ton:

El viernes pasado fui a una reunión de ex compañeros del colegio La Salle de Tuxtla. Todos andamos sobre los 50 y tantos años, y algunos, los que tienen, llevaron a sus esposas o a sus esposos.

Todo iba muy bien hasta que después de unos tragos, uno de los amigos empezó a hablar mal de una ex compañera que no fue a la reunión. Eso incitó a los demás hombres para despedazarla y decir que casi es una prostituta. Duque, yo no sé si sea verdad o mentira, pero me dio muy mala impresión ver a los varones expresarse así de una mujer que aunque está en trámites de divorcio, es una señora casada y con hijos. Yo no entiendo a esta sociedad machista. Te juro que si me molesta escuchar que una mujer se expresa mal de otra, en un hombre no lo puedo soportar.

Melany

Tuxtlatla Gutiérrez

Querida Melany:

Me parece que exageras. No sé si en todo el mundo suceda o no lo mismo, pero en Chiapas el mejor tema de conversación en las borracheras es la vida, sobre todo sexual, de los amigos que no fueron. No des tanta importancia a lo que platican los demás y trata de fijarte más en ti misma, porque te aseguro que con unas copas de más tú tampoco te pones a disertar sobre el último número del National Geographic o sobre el parque acuático eco turístico que se iba a construir sobre el río Sabinal.

Querido Duque:

Cuando conocí a mi esposo, él siempre quería que tuviéramos sexo a todas horas, porque, según él, yo era como una medicina para él, porque decía que solamente yo lo excitaba, que con otras mujeres casi no podía tener una erección por problemas en su aparato reproductor. Ahora, cada vez que le insinúo que quiero sexo, se molesta, me insulta con comentarios como: “pareces perra en celo” o “báñate con agua fría para que se te quite lo caliente”,  ya hasta miedo me da ser cariñosa porque el señor se molesta. Ya no sé qué hacer, lo último que me pasa por la cabeza es serle infiel. Ya traté de justificar su acción de mil maneras: que está cansado de trabajo, problemas con su aparato, no sé, ya no sé qué pensar. Duque: mi marido no me toca, no me quiere hacer el amor, me ahogo en un mar de deseos.

Andrea

San Cristóbal

Querida Andrea:

Evidentemente a tu esposo ya no le interesas en la cama, así que te que o te conformas o te buscas un amante o te divorcias. Yo te recomendaría lo tercero, un divorcio es una experiencia traumática pero liberadora. 

Querido Duque:

A nadie podría contarle esto más que a ti: soy hombre pero siempre he querido ser una jovencita. Tengo casi 50 años de edad, pero mi mayor deseo en la vida ha sido siempre ser una adolescente malcriada, caliente y desobediente; que mis papás me castigaran con nalgadas y cinturonazos muy fuertes todos los días por mi mal comportamiento. Quisiera que me amaran y me trataran como una princesita y vestirme muy girly, pero que a la vez fueran muy estrictos con mi disciplina.

José Antonio

Tuxtla Gutiérrez

Querido José Antonio:

Si eres valiente y tienes los medios puedes jugar a ser niña. Yo sé donde te pueden vender pantaletas del 40.

Querido Duque de Santo Ton:

Fui a un antro con una amiga y ahí conocimos a un grupo de muchachos con los que estuvimos bebiendo hasta que me puse tan mal que vomité y me llevaron a un carro a descansar, pero me embriagué tanto, que perdí todo juicio y no sé en qué momento terminé en el motel Álamos con uno de mis nuevos amigos. La cruda moral es la peor de todas, desde ese momento ya no tomo y mucho menos salgo de noche por miedo a que se repita lo que pasó o peor que mi novio se entere de que, aunque estaba borracha, le puse los cuernos.

Sofía

Tuxtla Gutiérrez

Querida Sofía:

Ya no te castigues tanto. Olvida lo que sucedió, todos nos emborrachamos alguna vez y hacemos cosas que creíamos que jamás llegaríamos a hacer.

Duque:

Me quiero suicidar.  Hace como dos meses le conté a un amigo que estaba triste, desmotivada,  vacía y que las continuas terapias, grupos de apoyo, medicinas e incluso en la búsqueda espiritual, no había encontrado ningún tipo de alivio ni de respuestas. Muy entusiasmado,  él me dijo que debería fijarme un objetivo, algo que yo deseara con toda el alma y que no me detuviera hasta conseguirlo.  Sin embargo no lo conseguí y me quiero morir. No tengo familiares cercanos, tengo más compañeros de trabajo que amigos y nadie me ama. Dicen los libritos de "superación personal" que uno debe ser hasta el extremo egoísta, pero yo no soy así. Es duro vivir una vida, sabiendo que el amor no puede salvar a las personas. Esa siempre fue mi frase favorita.

Alicia

Tuxtla Gutiérrez

Querida Alicia:

No creo que te suicides porque como dice el dicho: “perro que ladra no muerde”. Sin embargo te siento muy deprimida y te recomendaría que te sometieras a un tratamiento psiquiátrico. Por lo que entiendo tienes empleo pero no dependientes económicos, por lo que podrías pagar una terapia que te saque del bache. Sin embargo pon mucha atención: lo que necesitas es un psiquiatra, un médico que te prescriba las drogas que necesitas para ver la vida color de rosa y tomes control de ella. Tal vez te hagas dependiente de los fármacos que por cierto son carísimos, pero vale la pena dejar de sufrir y dejar de pensar en babosadas como el suicidio. 

Querido Duque:

Soy madre soltera de un niño y cuando nació le pedí a mi mejor amigo de toda la vida que fuese su padrino de bautismo y él acepto. Un año después, mi compadre me confesó que estaba enamorado de mí. Yo trate de evadirlo porque me sentía incómoda, pero él no se rindió e hizo hasta lo imposible para conquistarme y lo logró. Me enamore de él ya que siempre nos ha brindado mucho amor y dedicación a mí y a mi hijo, incluso más que el padre biológico. Mantenemos una relación amorosa y muy familiar. El problema es que aunque la familia de mi pareja sí me acepta, mi familia se opone argumentando que por ser mi compadre está prohibido para mí. Yo estoy muy feliz con él y con mi hijo, pero vivo atormentada porque no quiero tener en contra a mi familia ¿qué me sugieres?

Miroslava

Tuxtla Gutiérrez

Querida Miroslava:

Ya encontraste a un hombre que te mantiene y que, adopte o no a tu hijo, es  padrino de tu bastardo, su figura paterna y que hasta le puede dar su apellido ¿Qué más quieres? Además ya investigué y no es pecado, pero tienes que comprometerte en matrimonio con él para cumplir con el dogma y para tenerlo bien amarradito.

Querido Duque:

Soy gay, y tengo un romance con un hombre mayor que yo. La edad es algo que no me importa, pero ayer tuvimos relaciones en su casa, y él siempre me había dicho que también era gay y sin compromisos, pero mientras él me estaba haciendo la faena,  abrieron la puerta de su casa y una voz de mujer dijo "ya vine, Gordito…" Él se puso pálido y se vistió rápido pero yo me quedé desnudo. Ella entró al cuarto y por más que el intentó engañarla, fue inútil, la esposa lo golpeó y a mí me insultó, me dijo que el hombre que me había hecho el amor tiene tres hijos pequeños. Yo no sabía nada y me sentí muy mal, me vestí y con lágrimas en los ojos me fui de aquel hogar. Hoy él me llamó a mi celular, pero yo ya le dije que primero decida que quiere. Él dice que su esposa ya lo abandonó pero yo ya no se qué hacer ¿qué hago?

Aurelio

Tuxtla Gutiérrez

Querido Aurelio:

Si el hombre te gusta y te busca, sigue divirtiéndote mientras puedas, el casado es él no tú.