HOSPITAL DEL ALMA 290623

Por El Duque de Santo Ton

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Querido Duque de Santo Ton:

Tengo 45 años de edad y soy casado, pero desde joven he jugado futbol americano los fines de semana, y me conservo como si fuera un chamaco de 20. Además, soy muy atractivo de cara y cuido mucho mi piel y en general procuro siempre estar bien arreglado. La verdad es que me considero guapo y me gustaría intentar hacer sexo servicios, solamente para darle gusto a mi vanidad ¿Crees que alguien quiera contratarme, aunque ya sea un cuarentón?

Kevin

Tuxtla Gutiérrez 

Querido Kevin:

Si cobras barato y no te pones tus moños quizás en el mercado LGTB puedas conseguir algo. Por más cremas que te pongas y mucho ejercicio que hagas, el tiempo no perdona a nadie, y el sexo servicio es algo que se abarata con la edad, pero si lo que te interesa es el aplauso, entonces ve por él. 

Duque de Santo Ton:

Me casé muy joven con una mujer que cada vez se ha puesto más bella. Han pasado cinco años desde entonces y la verdad es que sería la esposa ideal, si no fuera porque a mí no me alcanza para pagar el tren de vida que lleva. Gasta muchísimo en su arreglo personal y en nuestros hijos. Al principio yo trataba de no cuestionarme de dónde salía ese dinero, ya que mi suegro dejó de apoyarnos hace mucho tiempo, hasta que no pude más y le pregunté directamente. Con la misma frialdad me respondió que se acostaba con varios hombres de nuestro mismo círculo social, quienes solventaban sus gastos. Me sentí morir de vergüenza, yo conocía a la mayor parte de sus “clientes”, me puse como loco y la hubiera madreado si no fuera porque ella también tiene muchos conocidos que trabajan en el gobierno y me hubiera ido peor a mí. Lo que hice fue largarme de la casa pensando en que si ella quería ser puta ahora lo tendría que ser. El caso es que nada cambió en esa casa, ni siquiera se dejaron de pagar las altísimas colegiaturas de mis hijos, y al poco tiempo unos abogados me buscaron para que firmara el divorcio, ya que mi ex quería casarse de nuevo, con un hombre muy rico y poderoso, al que también conozco. Así que la señora jamás cayó en la prostitución de esquina, por el contrario, subió de nivel y hasta se libró de mí.

Alex

Tuxtla Gutiérrez 

Querido Alex:

No cabe duda de que la dama sabe moverse en el tablero. 

Querido Duque:

Cuando me convertí en adulta empecé a sufrir ataques de angustia sin motivo aparente, y mi familia sólo me decía que me calmara, que no fuera payasa, que no quisiera llamar la atención y cosas así. Ahora estoy a punto de cumplir cincuenta años y no puedo vivir sin tomar tranquilizantes, pues cada vez el miedo es más intenso y ya he recibido todo tipo de tratamientos que no me han hecho ni cosquillas. Así es que yo vivo feliz cuando tengo a la mano mi calmante, pero siento que voy a morir cuando se me acaba o no consigo la receta necesaria para comprarlo. Además, en las farmacias cada vez es más difícil conseguirlo por no sé qué problemas hay con el gobierno.

Luisa

Tuxtla Gutiérrez

 

Querida Luisa:

No hay nada peor en este mundo que depender de algo para lo que sea. Me imagino lo que debes sufrir con esa enfermedad mental que te aqueja y de la que nadie te ha podido librar. Eres una drogadicta en el más estricto sentido del término, por lo que te recomiendo que enciendas una veladora amarilla y una azul a San Judas Tadeo, para que, si no se te pasa la necesidad de tomar tu calmante para estar tranquila, por lo menos consigas las recetas y tengas el dinero suficiente para comprar tu medicina y te la surtan en la farmacia. 

Duque de Santo Ton:

Mi novio y yo llevamos dos años saliendo, y él dice que me quiere tanto que me propuso matrimonio y me regaló un anillo de cinco mil pesos. Aunque se me hizo patética la proposición, porque no pienso amarrarme a un muerto de hambre el resto de mi vida, le dije que sí, y mientras él se la pasa haciendo planes, yo trato de imaginar cómo cortarlo porque, de hecho, ya me acuesto con mi jefe, aunque es casado. Duque, yo no nací para pasar miserias y no me importa compartir mi cuerpo mientras me paguen por ello.

Rocío

Comitán 

Querida Rocío:

Supongo que tampoco pensarás devolverle el anillo que te dio y que significa un compromiso. Te aconsejaría que se lo regresaras para calmar su frustración, pero lo dado, dado. 

Duque:

Estoy indignada por lo que lo que me pasó en la Catedral Metropolitana. La última vez que fui a México le pedí a mi esposo que me llevara a escuchar la misa de los domingos, y un par de chamagosas se nos acercaron para pedirnos dinero para su causa política y para sufragar los gastos de su “caudillo”. Yo les contesté que mejor se pusieran a trabajar si querían tener dinero y las dos malcriadas mujeres me dijeron hasta de lo que me iba a morir, sólo porque no les quise dar dinero.

Margarita

Tuxtla Gutiérrez 

Querida Margarita:

La próxima vez vete a la misa de la Villa. 

Duque de Santo Ton:

La otra noche mi papá llegó borracho y mi mamá le reclamó por ser tan irresponsable. Entonces mi papá se enojó mucho, sacó una pistola y cortó cartucho diciendo que la iba a matar. Mi hermana y yo nos pusimos delante de ella y le dijimos a mi papá que, si la quería matar, nos iba a tener que matar primero a nosotros. Entonces mi papá dijo que, si nos queríamos morir estaba bien, que nos encomendáramos a Dios porque nos iba a matar. Así nos tuvo como media hora hasta que bajó el arma y se sentó en la escalera a llorar de arrepentimiento. Yo sé que estaba borracho y que en realidad no nos quería hacer daño, pero en una de ésas se le hubiera podido salir un disparo. Yo ya le dije a mi mamá que le pida el divorcio, pero ella no quiere porque dice que no quiere que su familia se separe.

Cuco

Tuxtla Gutiérrez 

Querido Cuco:

Me parece que una situación de divorcio es algo que compete sólo a la pareja involucrada, y que meterse está de más pues el matrimonio sólo se disolverá si los cónyuges están de acuerdo. La verdad me preocupa que tu padre ande armado y con copas, pero no porque los vaya a matar a ustedes, no creo que ésa sea su intención, sino por tantas y tantas otras cosas que podrían sucederle. 

Querido Duque:

En la oficina extrañamos mucho tu Hospital del Alma en Internet. No nos cuesta nada comprar el periódico, pero a veces no lo conseguimos o se nos olvida. Antes todos visitábamos el Hospital del Alma en nuestra computadora antes de ponernos a trabajar y lo comentábamos divertidos, nos hacías empezar alegres la jornada.

Antonio

Tuxtla Gutiérrez 

Querido Antonio:

Qué falta de información: www.oyechiapas.com. Ahí puedes leer la columna todos los días. 

Duque de Santo Ton:

La pandemia me dejó sin trabajo, y como tengo más de cuarenta años, nadie me quiere dar empleo. Se me ocurrió crear un blog en Internet, en las redes sociales, pero no sé ni por dónde empezar.

Josué

Tuxtla Gutiérrez 

Querido Josué:

Mejor ni empieces, no es tan fácil como parece, necesitarías aportar un contenido novedoso y llamativo, además de que la producción es realmente cara, si quieres hacer algo que realmente te deje dinero. 

Querido Duque:

Mi esposo dice que me va a llevar a conocer Venecia ¿crees que sea muy caro?

Malena

Tuxtla Gutiérrez 

Querida Malena:

Lo que es caro para unos, para otros es barato, pero te recomiendo que mejor veas el documental del “Discovery Channel”.