Explotación seca laguna en Veracruz; farallón, la víctima

Debido a la sequía y uso indiscriminado del líquido, el suelo se ha abierto dejando enormes grietas de lodo endurecido y algunos caparazones secos y rotos

Agencia Excélsior

ACTOPAN, Ver. 

Paisaje erosionado de la laguna del farallón dista mucho del espectacular espejo de agua que brillaba bajo el sol desde la vista de la carretera Costera del Golfo Veracruz hace todavía 3 años. 

Hoy, ya no hay nada, ni un ápice de agua; el suelo se ha abierto dejando enormes grietas de lodo endurecido y algunos caparazones secos, rotos y vacíos. 

 “La verdad poco a poco se fue secando, se fue consumiendo el agua y las especies murieron, al no tener nada ahorita, está completamente seca”, contó Hermenegildo Martínez, pescador desde hace 40 años. 

La agonía de esta laguna se remonta al 2011 una publicación del Consejo Estatal de Protección al Ambiente (Coepa) alertaba que desde el 2006 había perdido más de la mitad de su volumen de agua debido al aumento en las extracciones y la disminución de la recarga. 

“Con los saqueos que hubo del agua pues la verdad si la lastimó mucho y no tenemos ni a qué tirarle, ni dónde pescar, y nuestra gente no tiene empleo porque el campo tampoco tiene empleo, estamos perdidos completamente, no tenemos dónde”, afirmó. 

En 2021, poco después de que se diera a conocer a través de medios de comunicación la dura situación por la que pasaba la laguna, personal de la Secretaría de Medio Ambiente visitó la laguna y en octubre del año pasado dieron a conocer que buscaría se declarara área natural protegida, para evitar la sobreexplotación, pero no se concretó.  

“El año pasado nada más decían que se había recuperado la laguna pero es un espejismo de agua lo que tiene, o sea con los humedales y eso ves que tienes agua, este año que es muy distinto, que se va a llenar de monte, van a ver una laguna muy pequeña”, dijo. 

 La desaparición de la laguna del Farallón dejó sin fuente de empleo a todos los pescadores que tenían permiso de pescar ahí, ahora se dedican a la agricultura, albañilería, o cualquier trabajo que les ofrezcan en la zona. 

“A lo que caiga, si hay chambita por rato la hacemos, de ayudantes de albañil, carpinteros de lo que vayan buscando y ahí va saliendo, hasta de jornaleros”, explicó Francisco Castillo, pescador y secretario de Vigilancia del comité de pescadores.

Hace un mes y medio los pescadores hicieron trabajos de limpieza en esta área en donde antes también había laguna, fueron cerca de 10 hectáreas que tuvieron que limpiar a punta de machete, con temperaturas sofocantes y bajo un sol abrasador.  

“La mera verdad fue mucha friega para lo que ganábamos (...) nos rasguñábamos, espinábamos, salíamos desgarrados de la mano, nos caía en el cuerpo, pero por la necesidad, vamos a poner de rescatar parte de lo que le corresponde a las cooperativas, nos interesaba y le dábamos duro por la necesidad”, narró. 

 Ante la apatía de las autoridades en tomar acciones reales hacia el posible rescate de la laguna, los pescadores plantearon algunas opciones en donde había fuente de empleo para ellos. 

“Que nos dieran apoyos para hacer tinacos, estanques y pozos, aquí el agua no está honda, en un metro a dos metros tenemos agua para llenar los estanques (...) para que cuando la laguna suba en tiempo de agua hasta sirve que podemos rescatar de esa misma tina la especie para que se reproduzca y se expanda en el área”, dijo. 

 Sin embargo, las autoridades parecen no escuchar el llamado de los ciudadanos. El espejismo que dejó la temporada de lluvias del año pasado, con un poco de agua en la laguna, los tranquilizó, pero el estiaje de este año, y las altas temperaturas, terminaron por dejar sin una gota de agua a la laguna del Farallón, en donde ahora hay pescadores sin peces, lanchas abandonadas y muelles abandonados.