Recomiendan precaución ante consumo de carne de puerco

CHRISTIAN GONZÁLEZ/Tuxtla Gutiérrez 

Sergei Farrera Villatoro, especialista en neurofisiología manifestó que, durante y después de la pandemia, incrementó el número de pacientes con epilepsia, provocado principalmente por una bacteria llamada cisticercosis que ataca el cerebro.

Aseguró que, a pesar de que en un inicio se utilizó el medicamento conocido como Ivermectina como tratamiento contra la coivd-19 y que se pensaría que de ahí se desencadenó una serie de eventos de ataques epilépticos, refirió que de hecho Chiapas y Mérida son lugares que presentan un alto consumo de carne de puerco y que existe la probabilidad que se deba a esto.

Alertó, de hecho, que alrededor del 50 por ciento de la carne que se consume de ese animal proviene de criaderos de traspatio, “el puerquito, sabemos, es de los pocos animales que puede comer de todo, como materia fecal, y puede ser el huésped intermediario de la ‘taenia solium’ (la bacteria del cisticerco)”.

Tras advertir que los cisticercos pueden vivir entre tres y 15 años, el también presidente de la Academia Nacional e Geografía e Historia, capítulo Chiapas, manifestó que en estos casos influye mucho la respuesta inmunológica específica, es decir personas que pueden consumirlo, “lo que pasó con el covid, algunos aguantaron, no les pasó nada, y a otros los intubaron o murieron”.

De hecho, apuntó que en la actualidadse requiere de mayor difusión del tema de la cisticercosis, a pesar de que Chiapas sea uno de los primeros lugares en medidas sanitarias, sobre todo en el tema de los puercos.

Incluso, reveló Sergei Farrera, a nivel Latinoamérica, los porcicultores de la entidad chiapaneca tienen más infraestructura con respecto a los de otros lados. “El actual gobernador ha metido buenas políticas al respecto”.