El pastor del Rebaño; Almeyda, el unificador

Matías Almeyda heredó de sus padres el concepto de familia como tribu, el de estar siempre unidos, mismo patrón que repiten sus equipos

Nota y foto “Excélsior”

CIUDAD DE MÉXICO.

Matías Almeyda en Azul, Argentina, vivía en una casa con dos habitaciones y un baño. En un cuarto dormían sus padres y en el otro él con sus dos hermanas. Antes de dormir, al ser el más chiquito, era el último en ir al baño. “Siempre me tocaba la tapa calientita”, dice en el libro Alma y Corazón, su biografía autorizada. En ese pedacito de terreno conoció la importancia de la unión de grupo, misma que ha tratado de inculcar en los tres equipos que ha dirigido: River Plate, Banfield y Chivas.

 

“En el futbol se suele decir: adentro de la cancha todos se matan por el otro. Y es mentira. Si yo no te saludo bien, no te voy a dar la pelota bien, por eso me gusta fomentar la unión y la charla”, explica el actual entrenador de Chivas, en su biografía,

Almeyda, en Argentina, promovió la convivencia entre David Trezeguet, Fernando Cavenaghi y Chori Domínguez, usando la bandera, el escudo, la playera, de River Plate como el pretexto.  En el Guadalajara cambió el discurso, tomó a un equipo que estaba en posiciones de descenso y les dijo que ellos peleaban no sólo por un equipo, sino por un país que se “sentía representado por 11 mexicanos”, comentó.

Así sucedió en la final contra Morelia, en la Copa, Matías Almeyda les dijo a sus jugadores: “el himno lo van a cantar con amor propio, mostrando que son puros mexicanos y que los mexicanos pueden”.

Matías heredó de sus padres el concepto de familia como tribu, el de estar siempre unidos aun en las malas. Así como reúne a toda su familia, casi 40 personas, en las festividades decembrinas, también busca que haya camaradería en los equipos que dirige.

atías Almeyda se ha destacado por trabajar en la integración. Este equipo se ha destacado por la unión que tiene. Corremos parejo todos, todos buscamos un objetivo. Confío en cada compañero del equipo y ellos confían en mí. Ésa es la clave del equipo, la unión que forjamos”, dice Edwin el Aris Hernández, lateral del Guadalajara.

Somos un grupo muy unido y damos todo por el que está enfrente. Hemos enfrentado juntos los problemas de lesiones. Somos un plantel de 24 jugadores, que todos tienen deseos de entrar a la cancha y los que no juegan, apoyan al que está en la cancha”, cuenta Rodolfo Pizarro, mediocampista de Chivas.

Me gusta la idea de sacar al futbolista fuera del ámbito del futbol, pasar un momento nosotros, sin prensa, sin familiares, sin amigos,  sólo el grupo que trabaja por un objetivo. Ojalá un día pudiéramos concentrar en una isla”, dice el Pelado Almeyda, algo que ha aplicado en la liguilla con Chivas. La puerta de Verde Valle, lugar donde entrenan los rojiblancos, sólo se abre una vez a la semana durante cada fase de liguilla. El técnico rojiblanco cumple con el ritual de hablar después de cada partido y después, aislamiento total, sólo los jugadores y el técnico, sólo familia la familia Chivas. 

Creo que eso se ha ido formando con el tiempo. Al ser un entrenador desconocido. Creo que con el correr del tiempo supieron entenderme, creerme. Es lo más difícil, que un futbolista le crea al técnico. Hemos sido muy claros desde el principio, en el respeto. Soy un obsesionado primero con el triunfo y un obsesionado de que el jugador de futbol debe disfrutar lo que hace”, agrega Matías Almeyda.

Uno de los puntos más fuertes que tiene este equipo es el grupo. La predisposición, nunca me ha tocado, estuve seis años dirigiendo.  Tuve chance de entrenar a dos equipos antes, la predisposición que muestran mis jugadores a la hora del trabajo, en la pretemporada, en la alimentación, nunca lo viví”.