Servant termina con una temporada épica y emocional

El director y productor  habla de la última entrega de su serie de terror psicológico y cómo su hija también estuvo presente.

Agencia Excélsior

De hacer cine y hacerse de un nombre en el gremio con exitos como El sexto sentido (1999), Señales (2002), y la saga El protegido (2000), Fragmentado (2016) y Glass (2019), el productor y director M. Night Shyamalan se introdujo en el mundo de las series en 2019 con Servant y su debut en la TV resultó tan majestuoso que el show se ha posicionado como uno de los más aclamados por la audiencia, que logró trasladar a la perfección su ingenio y visión a un formato completamente nuevo, sin embargo, ahora que llega a su fin, admite que se siente un poco aliviado.

He estado tan involucrado en esta serie y al mismo tiempo en terminar mi otra película (Llaman a la puerta) que estoy realmente cansado porque puse todas mis herramientas en ello, pero también siento que esa misma presión causó algo muy único en cuanto a las tonalidades, mi conexión con la historia y la gente con la que la estoy contando y el arco de la narrativa, estoy haciendo cosas que tal vez no habría hecho si no tuviera toda esta presión detrás y ha sido fascinante.

Pero siento como si hubiera estado entrenando al mismo tiempo dos deportes que amo y que son totalmente diferentes, éste, el del cine en el que crecí jugando, y ahora la televisión, pero hay una parte de mí que siente que no puede hacer los dos en este nivel y por tanto tiempo, física y emocionalmente fue muy difícil de hacer y parte de mi desea haber hecho sólo una cosa, preguntándome si podría haber hecho ocho temporadas de Servant si sólo hubiera hecho eso, pero al final creo que ambas cosas se complementaron”, compartió Shyamalan en entrevista.

A lo largo de cuatro temporadas ...la última ya está disponible en Apple TV+, el director logró cautivar a su audiencia con una historia tan conmovedora como aterradora, pisando un terreno desconocido que logró sortear a la perfección usando la que reveló ha sido su única arma secreta: la complicidad con su audiencia.

Trabajando en estos dos formatos ha sido fascinante descubrir cómo la gente consume los contenidos en esta especie de multitasking en el que están haciendo múltiples cosas a la vez y dejan el show de fondo, y yo trabajo a la inversa porque lo que quiero es que miren mi propuesta, que si tienes a una pareja peleando pienses ‘¿Quién está enojado?, ¿Por qué lo está?, ¿Qué no te estamos diciendo?’, para que así dejes lo que estás haciendo y me des toda la atención.

Porque el secreto es que eres requerido para finalizar el arco de una historia que está ligeramente incompleta, la gente me dice ‘¡Guau! Realmente le has atinado con Servant’, pero es la audiencia la que dobletea mi trabajo, los necesito para que termine el relato, porque sé que saben que llegaremos a algún lado, saben que los llevaré hasta ahí, pero quiero que disfruten cada una de las revelaciones logrando un contenido que vaya más allá de sólo ser una distracción para olvidarse de sus preocupaciones”, explicó el indioestadunidense.

Desde que el cineasta escribió su nueva obra maestra supo que tendría un inicio y un final y mucho ha hablado de esta decisión y su determinación al no cambiarla pese al éxito, pues ha resaltado que no quiere arruinarla forzándose a extenderla y a sabiendas de que su final es pieza fundamental en su grandeza.

Por ello, pese a que todos los involucrados, incluidos sus protagonistas, Lauren Ambrose, Toby Kebbell, Nell Tiger Free y Rupert Grint, están tristes de decir adiós, entendienden y respetan completamente su decisión, asegurando entre risas que no le guardan rencor por no ceder ante la posibilidad de continuar la historia.

Como personas que queremos mantener nuestro trabajo todos pensábamos: ‘¡Dios! ¿De verdad tenemos que dejar esto?’ e intentamos idear todo tipo de cosas para seguir, pero creo que él vio lo importante que era terminar de contar la historia de esta familia que está rota y se rehúsa a aceptar su dolor”, comentó Kebbell.

Totalmente y por eso no hay resentimiento alguno, creo que todos estamos de acuerdo en que es el momento correcto para terminarlo, todos estamos listos para poner esta historia finalmente a dormir y darle al público algunas respuestas y creo que en ese sentido todos nos sentimos en paz con este final, tristes, pero en paz”, agregó Free, quien confesó haber llorado desconsoladamente en su escena final.

Además de finalmente dar respuesta a algunas de las incógnitas establecidas en la trama que sigue el duelo de una familia que confronta la pérdida de un hijo, una de las grandes sorpresas de este cierre es que seis de sus 10 episodios contaron con la dirección y visión de la hija de Shyamalan, Ishana, lo que aseguró tornó el proyecto aún más significativo para él.

Cuando contraté a mi hija para dirigir un episodio de la segunda temporada, fue un momento aterrador para ella, había visto sus cortos y sabía lo talentosa que era y le dije ‘creo que deberías hacerlo’. Llegó al set y no sé que pensó Apple y el resto del equipo, pero yo sabía que teníamos a una superestrella y luego ese capítulo se convirtió en uno de los favoritos de la temporada y ahora esto”, relató emocionado.