Así fue como Israel se convirtió en un país rico

Agencia Excélsior

Actualmente las miradas están puestas sobre Israel, esto luego de que se declarara en estado de guerra tras el sorpresivo asalto del grupo Hamás desde Gaza. Sin embargo, una pregunta que podría surgir es cómo es que Israel se convirtió en país rico.

Israel es quizá el país más sorprendente de todo el mundo, por un lado, es una nación que, dominada por el  enfrentamiento territorial y religioso, lleva años inmerso en un sinfín de conflictos bélicos, por otro, es el único país de Medio Oriente que tiene una economía próspera.

Aunque Israel es una nación pequeña, con tan solo nueve millones de habitantes, logró convertirse en uno de los países tecnológicos más influyentes de todo el mundo.

De tal modo que ningún país del mundo tiene más empresas de alta tecnología como Israel.

Todo esto ha convertido a Israel en la segunda potencia tecnológica a nivel mundial, solo por detrás de Estados Unidos (EU), y en el exportador de las mejores Startups del planeta, entre ellas destaca Waze, vendida a Google por mil millones de dólares.

¿Cómo es que Israel se convirtió en una de las mayores potencias tecnológicas? 

Israel no siempre fue un país sobresaliente, pues en el año de 1980 la economía estaba débil, con una tasa de inflación de aproximadamente 450 por ciento, incluso alcanzó un máximo de 950 por ciento.

Tal situación provocó que en el año de 1985 destacados líderes israelíes se reunieron para resolver el problema del colapso de la economía; en la reunión se acordó reducir el gasto público, devaluar la moneda, privatizar muchas empresas e imponer un control de precios.

Cuando lograron controlar la inflación, empezó a llegar inversión extranjera, eso permitió que la economía de Israel se restableciera e iniciara la prosperidad financiera.

Por supuesto, la prosperidad económica de Israel no solo fue por la inversión extranjera, sino que el país tuvo que recorrer un largo camino y, sobre todo, enfocarse en cuatro aspectos.

Educación

Tras la caída de la Unión Soviética la mayoría de judíos soviéticos emigraron a Israel, por ello, aumentó la población trabajadora con altos niveles de educación, pues anteriormente, la mayor parte de la población nativa del país no contaba con estudios.

Israel es uno de los países que destaca en educación, pues ha apostado, desde hace muchos años, por un modelo de conocimiento e innovación; su sistema educativo es excelente desde la primaria hasta la educación superior, lo que significa una ventaja competitiva frente a otras naciones.

Así, con el gobierno israelí controlando la economía, el regreso de los inversionistas y los migrantes, altamente educados, Israel se convirtió en un país de negocios.

La cultura militar

Israel cuenta con uno de los ejércitos más modernos del mundo, pues está equipado con un arsenal nuclear altamente tecnológico, además, las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) tiene casi 170 mil militares activos.

Según datos de 2019, la FDI tiene un presupuesto aproximadamente de 20 mil millones de dólares, y ocupa la posición número 15 en términos de gastos militares a nivel mundial.

Por si fuera poco, en Israel el servicio militar es obligatorio, tanto para hombres como para mujeres, ya que, en el ejército adquieren conocimientos tecnológicos de los mejores ingenieros militares.

Inversión pública y privada

Israel es uno de los países que más éxito ha tenido con la creación de programas de inversión pública y privada en Startups.

Un claro ejemplo de este programa es Yozma, ya que en esta empresa el gobierno israelí, en vez de invertir en solitario, buscó aliarse con compañías tecnológicas que tuvieran fondos económicos para hacer crecer la industria.

Así, el gobierno de Israel lleva varios años invirtiendo en compañías y buscando acuerdos económicos tanto nacionales como internacionales, de tal modo que logra que las Startups se vuelvan llamativas para que los empresarios inviertan capital.

¿El resultado? Israel tiene un PIB per cápita de 43 mil millones de dólares, por lo que es casi veinte veces mayor al del empobrecido Egipto y cinco veces más grande que del Líbano.

Entonces la educación, la inversión tecnológica y la cultura militar han provocado que Israel se haya convertido en un atractivo paraíso, para que los millonarios extranjeros quieran invertir en las industrias tecnológicas, o bien, tener un negocio estable para conservar su riqueza.