HOSPITAL DEL ALMA 300419

 

 

 

Por El Duque de Santo Ton 

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Querido Duque de Santo Ton: 

Cuando falleció mi esposo, mis dos hijos ya estaban casados y vivían fuera de Chiapas, con muy buena posición económica. A mí, mi marido también me dejó bastante bien protegida, por lo que jamás he aceptado irme a radicar fuera de Tuxtla Gutiérrez, que es la ciudad en la que nací y en la que he vivido toda mi existencia.

Tengo una buena casa con jardín, alberca y huerto de mangos, además de dos coches último modelo para mi servicio. Además de la cocinera y el mozo, también tengo jardinero y chofer, y ¿para qué te voy a engañar?, desde hace dos años mantengo relaciones en secreto con el jardinero, que es un ahijado mío que vino a pedirme trabajo y se lo di. El muchacho tiene 19 años y yo 59, pero jamás se niega a complacerme en la cama, me habla de usted, además de que no ha dejado de decirme “madrina”, lo cual me parece un poco extraño, porque en la cama hacemos de todo ¿piensas que me esté aprovechando de mi ahijado por pagar sus favores sexuales? 

Mercedes 

Tuxtla Gutiérrez  

Querida Mercedes: 

Depende de cuánto le pagues.  

Duque: 

Aunque mi familia es de la aristocracia chiapaneca, yo salí con mi “domingo 7” y tuve un hijo sin padre. Fue muy duro, Duque, pero me aguanté y la gente poco a poco me fue aceptando, pero nunca faltaba quien me humillara a mí o a mi mamá, con comentarios malintencionados. En una fiesta estuve bailando con un señor que dicen que se divorció de su mujer porque en realidad es gay, pero desde entonces empezó a cortejarme hasta que me propuso matrimonio. Yo lo mandé a investigar y resulta que sí, que sí es gay, pero de todas maneras pienso casarme con él y legitimar a mi hijo. 

Brenda 

San Cristóbal  

Querida Brenda: 

Me parece bien que seas pragmática, pero creo que no deberías preocuparte tanto por tener contenta a una sociedad que siempre va a despreciarte, hagas lo que hagas. En nuestro medio, el respeto solamente se gana con poder y con dinero.  

Querido Duque de Santo Ton: 

Una amiga que vive en Tokio, la capital de Japón, me escribió para decirme que me vaya para allá, a trabajar de bailarina topless, es decir, bailando sólo con calzón sin nada arriba. Dice que los dueños de la discoteca pagan muy bien, sobre todo a las mujeres latinoamericanas pechugonas, como yo. Dice que dan hospedaje y alojamiento, y que voy a poder ahorrar mucho para poner un negocio en el centro de Chiapa de Corzo, lo cual siempre ha sido para mí un sueño. 

Yaya 

Tuxtla Gutiérrez  

Querida Yaya: 

A una amiga mía le hicieron un ofrecimiento similar al tuyo, pero ella sí aceptó, y llegando al cabaret, en Japón, le quitaron su pasaporte y su visa. La tuvieron encerrada y no le dieron de comer, hasta que aceptó bailar completamente desnuda ante el público nipón, y tener sexo por lo menos tres veces por noche. Descansaba los lunes, así que échale pluma. La pobre de mi amiga tuvo que luchar cerca de un año para liberarse de la mafia de traficantes de sexo, recuperar sus papeles y regresar, sin un centavo, a Chiapas. Ni siquiera aprendió a hablar en japonés porque sus clientes iban a lo que iban.  

Duque: 

Cuando era chiquita mi mamá nos abandonó a mi papá y a mí, y nos tuvimos que ir a vivir a casa de mi abuelita. Ella me ha cuidado siempre, porque mi papá se volvió a casar y su nueva señora no quiso que yo me fuera a vivir con ellos a San Cristóbal. Ahora mi abuelita va a hacer su testamento y como ya cumplí diecinueve años, me quiere heredar su casa de la Tercera Sur. Mi papá se enojó mucho porque dice que el hijo es él, y como mi abuelita no le hizo caso, me agarró a patadas y me dijo que a él le toca la casa, pero yo digo que no puede hacer nada porque mi abuelita no se ha muerto ¿estoy en lo cierto? 

Reyna 

Tuxtla Gutiérrez  

Querida Reyna: 

Tienes razón, tu abuela puede hacer su testamento como mejor le convenga, a menos que tu padre solicite que sea declarada en estado de interdicción e incapaz para administrar y disponer de sus bienes. Antes de que eso suceda, sugiérele a la señora que en lugar de heredarte la casa, te ceda la propiedad y la ponga a tu nombre, ya que tú eres mayor de edad y puedes hacerte cargo del inmueble.  

Duque: 

Yo no soy homosexual, pero “le doy servicio”, por así decir, a un gay que tiene una estética que le deja mucho dinero. Antes me traía muy bien vestido y alhajado, pero desde hace un tiempo se hace el tonto y no me quiere comprar nada. Le pegué sus buenas golpizas sin ningún resultado y el otro día le dije que ya lo voy a abandonar para irme a vivir con mi esposa, porque yo no soy ningún joto como él. Más bravo que una vaca sin becerro, me dijo que ni se me ocurra abandonarlo porque ese día me mata. Yo no lo creo capaz de hacerlo, por lo que sí voy a regresar con mi mujer y con mis hijitos, lo malo es que no sé cómo los voy a mantener. 

Jeremy 

Tuxtla Gutiérrez  

Querido Jeremy: 

Si tienes relaciones con otros hombres, en cualquier condición o postura, tú también eres homosexual, así que no te hagas pato y enfrenta tu identidad sexual. Se me hace aberrante que vivas con ese gay sólo por la ropa, el dinero y las alhajas que pueda darte, ya que eso, aquí y en China, se llama prostitución. Por último, no seas desgraciado con tu esposa y con tus hijos, tu abandono y tu promiscuidad pueden traer para ellos consecuencias nefastas ¿no has oído hablar del SIDA? Ojalá que en tus devaneos por lo menos uses condón.  

Duque de Santo Ton: 

Soy una chava de 29 años que anda en busca del amor verdadero. Todos los hombres que he conocido en mi vida me han engañado y aunque mis amigas me han aconsejado que sea distante con los hombres hasta no estar segura de sus intenciones, a la hora de la hora termino cediendo, me voy a la cama con ellos, y ellos me abandonan ¿por qué será? 

Celina 

Tuxtla Gutiérrez  

Querida Celina: 

Seguramente los hombres te abandonan porque sienten tu ansiedad de retenerlos, además de que eres tan fácil, que te acuestas con ellos sin estar casada como si fueras una callejera. La moral no es algo pasado de moda y sin objeto, sirve precisamente para proteger a chicas como tú, que piensan que la vida es color de rosa. No mi reina, si no cuidas lo tuyo, nadie lo va a hacer por ti.