HOSPITAL DEL ALMA 110419

Por El Duque de Santo Ton

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Querido Duque:

Estoy enamorado de una mujer medio estúpida, pero que es guapa, generosa y comprensiva.

El problema es que su esposo es policía y es un tipo violento, celoso y de mal carácter. Algo me dice que si sigo con esta relación, alguno de los tres saldrá herido y no será precisamente el marido. Quisiera saber que me aconsejas.

Javier

Tuxtla Gutiérrez 

Querido Javier:

La respuesta es obvia, aléjate de esa mujer y búscate otra que sea guapa pero que no tenga tantos inconvenientes. Andar con mujeres casadas tiene su encanto, siempre y cuando no se vuelva algo permanente. Las damas con marido son como las paletas heladas, que solamente se chupan una vez. 

Querido Duque:

Una de mis primas se fue a la Ciudad de México con un señor que le prometió casarse con ella y volverla artista de cine. Lo malo es que no solamente no se casó con ella, sino que tampoco la volvió artista de cine, pero sí le hizo un hijo y luego la abandonó. Antes de tirarse a la perdición, mi prima prefirió volver a Tuxtla, cargando a su chamaquito. Ella es muy guapa, se arregla muy bonito y me parece que puede rehacer su vida ¿crees que aún sea posible?

Luz María

Tuxtla Gutiérrez 

Querida Luz María:

Aunque sea una chica bonita, me parece que además de caliente, tu prima es medio tonta. Se nota que no sabe sacarle partido a las cosas que Dios le dio, por lo que necesita encontrar a un hombre con la suficiente autoridad para hacerla agarrar juicio, si no el día menos pensado nos vuelve a salir con otro “domingo 7”. 

Querido Duque de Santo Ton:

En la colonia en la que vivo, hay un muchachito como de 11 ó 12 años, muy blanco y bonito, hijo de una señora que es madre soltera que trabaja todo el día y no puede controlar a su hijo, que es bastante “afeminado” y está desatado sexualmente. Cuando están borrachos, algunos hombres se lo llevan y lo convierten en su juguete sexual. Yo creo que alguien debería intervenir, pues ese chamaco corre el peligro de verse involucrado en un incidente desagradable o de contraer alguna enfermedad de transmisión sexual.

Sandy

Chiapa de Corzo 

Querida Sandy:

Desgraciadamente en México no contamos con instituciones de trabajo social, que realmente tutelen el bienestar de los mejores, por lo que no queda más remedio que rogarle a Dios que el niño deje sus puterías y agarre juicio. 

Duque de Santo Ton:

Tengo 40 años de edad, soy una ejecutiva exitosa, también soy guapa, distinguida, elegante, simpática y sencilla, pero no tengo novio. La otra noche me presentaron a un hombre muy guapo en una cena, que desde entonces me pretende y quiere una relación formal conmigo. Me trata como a una reina, tiene muy buen tipo, es muy educado y cortés, pero no tiene trabajo fijo y sus finanzas son tambaleantes. De hecho, por eso se divorció de su primera esposa, quien lo dejó por no tener dinero. Sin embargo, a mí el hombre me encanta, y con lo que gano podríamos vivir muy desahogadamente los dos, pero se me hace impropio mantener a un hombre, teniendo yo tantas cualidades.

Marisa

San Cristóbal 

Querida Marisa:

Debes escapar de ese tipo antes de que sea demasiado tarde. Según me lo describes, es el típico “vividor” que no se conformará con tu belleza, tu juventud y tener quien pague sus gastos, sino que estará junto a ti hasta que haya terminado contigo y no quede nada de ti ni de tus bienes. 

Duque de Santo Ton:

Tengo una amiga a la que quiero mucho, pero he notado que se pone feliz cuando me va mal, y se regocija cuando me sucede algo malo. Parece como si quisiera alimentarse de mi desgracia, pero dice quererme tanto como yo a ella, es algo muy raro.

Emilia

Tuxtla Gutiérrez 

Querida Emilia:

Lo que me cuentas es tan común como los huevos tibios. La envidia es un sentimiento casi natural en las personas, y son pocas las que pueden decir que no la sienten, aunque hay casos. Te recomiendo que seas cautelosa con tu amiga, que no le cuentes secretos ni confidencias ni le des la espalda porque, dado el momento, no dudará en clavarte la trapera puñalada. 

Duque de Santo Ton:

Quisiera conocer a un taxista, de 20 ó 30años de edad, con buen cuerpo, higiénico y saludable, para brindarme servicios sexuales cuando se lo requiera. Yo soy divorciada, sin compromisos, no fea pero no creo en el amor. Estoy dispuesta a pagar según aptitudes y disponibilidad.

Yazmín

Tuxtla Gutiérrez 

Querida Yazmín:

El no creer en el amor no justifica tus puterías. 

Duque de Santo Ton:

A pesar de que Chiapas se hizo famoso a nivel mundial por su insurrección zapatista, que debería tener como lema el reparto agrario, a mi suegro, que es un político muy importante, acaban de donarle una preciosa finca, que tiene un casco palaciego, cientos de reses de registro y unos potreros de sueño. Con decirte que me siento una señorita porfiriana cada vez que voy ¿cómo es posible que sucedan esas cosas?

Georgina

Tuxtla Gutiérrez 

Querida Georgina:

Tú lo has dicho: estamos en Chiapas. 

Querido Duque de Santo Ton:

Yo no soy de aquí, soy de Monterrey pero me casé con un chiapaneco que me trajo a vivir aquí. Tengo una casa preciosa, en las afueras de Tuxtla (obviamente), dos sirvientas, una cocinera, un ama de llaves, dos choferes, un mozo y varios escoltas. Lo que no me gusta de aquí es que el chiapaneco en general es feo e igualado. Les suplico a mis hijos que no se lleven con cualquiera pero, la verdad es que no hay mucho de donde escoger: en Chiapas hasta los ricos parecen pobres.    

Alix

Tuxtla Gutiérrez 

Querida Alix:

Me sorprende que teniendo esa opinión de Chiapas y de los chiapanecos, te hayas enamorado de uno de ellos.  Tienes que acostumbrarte a nuestro estilo porque, de lo contrario, tu vida se tornará un infierno a pesar de la legión de criados que dices tener. 

Querido Duque:

Estoy enamorada de un hombre de lo más corriente. Es borracho y tiene el cuerpo tatuado, pero me pone muy “horny”, además de que es insaciable en la cama. El caso es que además de corriente, el tipo trabaja de policía en un supermercado y no sé cómo decirle a mi papá que me quiero casar con él, ya que estoy seguro de que se va a oponer.

Cielo

Tuxtla Gutiérrez 

Querida Cielo:

No le digas nada a tu papá antes de la boda, cásate con tu mecapalero y luego Dios dirá. No te arriesgues a que arruinen tu calenturiento sueño.