Punto de cruce: La biodiversidad de Chiapas...

La Biodiversidad de Chiapas como Corazón de Mesoamérica

Por Froilán Esquinca Cano 

Haciendo una reflexión histórica, Mesoamérica, es considerada un área que ha sido ocupada evolutivamente por una amalgama de fusiones y ensamblajes geológicos, con la Gondwana acoplándose hace 250 millones de años a Norteamérica y detonándose un sinnúmero de movimientos que dieron origen a la estructura geológica y fisiográfica que han caracterizado el paisaje contemporáneo, que dio identidad a partir de hace aproximadamente 2500 millones años la presencia de vida y evolutivamente  a la humana en esta porción estrecha del Continente Americano, reconocida como Mesoamérica. A partir de la periodización arqueológica desarrollada por varios investigadores tales como; Zelia Nuttall, Manuel Gamio, Franz Boas, Herbert Spinden, Alfonso Caso, Wigberto Jiménez, Jorge A. Vivo, Ignacio Bernal, Ignacio Marquina, Pedro Armillas, Miguel Covarrubias, Angel Palerm, Peter Wolf, enre otros han contribuido a que arqueológicamente denominemos a esta región Mesoamérica con sus culturas que funden cerca de 4500 años de historia evolutiva y de realidad cultural que permiten a esta región ser considerada como una de las más ricas culturas del mundo.

El Hotspots (puntos más ricos en biodiversidad del planeta) de Mesoamérica originalmente no fue incluido por Myers en 1988 en donde mencionan los 18 hotspots más importantes del mundo y en 1990 Conservación Internacional lo incluye como parte de ellos.  Posteriormente Russell A. Mittermeir en 1992 publicó un estudio en donde destaca la importancia de Mesoamérica como una de las regiones más ricas y diversos hotspots sobre la tierra que ha sido reconfirmado con base a los nuevos análisis que se han efectuado sobre Hotspots, como se ha definido, este incluye todas las formaciones de naturaleza de plantas tropicales y subtropicales, desde el canal de Panamá, pasando por Costa Rica, Nicaragua, Honduras, El Salvador, Guatemala, Belice y se extiende sobre el sureste y parte central de México hasta el Río Fuerte en Sinaloa hasta el Oeste de Tampico. Esto incluye todos los bosques húmedos tropicales y subtropicales, así como las formaciones de bosques secos. En términos de unidades políticas el Hotspot Mesoamericano, cubre Centroamérica con todos sus países, excepto la región Este y Sur de Panamá, la cual está incluida en el Hotspot Chocó-Darien-Oeste de Ecuador; todos los Estados de; Chiapas, Tabasco, Colima, Veracruz, Oaxaca, Campeche, Yucatán, Quintaná Roo y partes de los Estados de Jalisco, Guerrero, Puebla, Sinaloa, Nayarit, Michoacán, Tlaxcala, México, Morelos y Tamaulipas. Todo este Hotspot cubre un total de: 1, 154,912 km2 que lo coloca en el 8º. Hotspot dentro de los 25 más importantes en extensión del planeta.

La verdadera riqueza en biodiversidad de esta región es en parte atribuible a su posición geográfica, a la interfase entre dos de las regiones biogeográficas más importantes: La Neártica de Norteamérica y la Neotropical del Sur, Centroamérica, El Caribe y a su papel que juega como puente entre continentes, ya que hace 5 millones de años, aquellas  masas con procesos celulares autónomos se pusieron en contacto e inmediatamente las especies empezaran a fluir en ambas direcciones a través de Centroamérica, creando lo que llaman la Paleobiología “El gran intercambio biótico de América, esto fue cuando los monos de Sudamérica ven a los mapaches en Centroamérica; al mismo tiempo, lo complejos procesos de especiación ayudados por la topografía accidentada y la multiplicidad de microclimas del puente terrestre, produjeron en esta región sus propias especies únicas, dando como resultado uno e los más altos niveles de biodiversidad del planeta y creando flora y fauna endémica en la zona de transición.  Tal como se produjo en Wallacea: la gran zona de transición Indo.-Malaya y las Áreas en Australasia en la Región Asia-Pacífico. En el caso de Mesoamérica, ésta transición se localiza en Oaxaca y Chiapas (los Estados más diversos de México, Mittermier, 1992), sin embargo los niveles de endemismos son altos en toda la región.  Es importante mencionar que se puede claramente hacer un corte transicional en Mesoamérica más claramente que en la región de Wallacea, ya que la sucesión de islas hace más difícil encontrar las fronteras entre una isla y otra.  El Hotspot entero de Mesoamérica puede ser considerado la mayor zona de transición; por lo que consecuentemente debemos formar varios subcomponentes de esta compleja área y se ha dado por reconocer la Región Mesoamericana entera desde la frontera Norte del Neotrópico hasta el canal de Panamá como un sencillo y largo Hotspot. No por estas longitudes de transición, se piense que sus tierras planas y colinas, aquí se encuentren los picos más altos como el Pico de Orizaba, Santa Martha, Sierra Las Minas, Chirripo, así mismo, las islas que corren por los márgenes Atlántico y Pacífico de la Región, contienen altos endemismos y especies migratorias, como las Islas Revillagigedo, El Caribe, así como los Arrecifes coralinos más importantes de América.

Una de las principales característica de la región son los ejes montañosos, localmente llamados sierras o cordilleras, que actúan como barreras para la dispersión de especies, resultando en considerables diferencias biológicas entre las partes bajas del pacífico y el Caribe en ambos lados.  Por otra parte, los valles y tierras bajas corren paralelos a estas cadenas montañosas y que han servido ampliamente como corredores naturales para la dispersión de animales y las migraciones humanas; el resultado es un complejo mosaico de bosques secos, bosques tropicales, zonas húmedas y bosques montañosos, los cuales con la mezcla de flora y fauna neotropical y neártica mencionados anteriormente, resulta en uno de los niveles más altos de biodiversidad y endemismos en la tierra, representados por 24,000 plantas vasculares de las cuales 5,000, el 21% son endémicas, la cuarta más importante en biodiversidad.  Las mismas montañas sirven como barreras físicas para el movimiento de las masas de aire, extendiendo por varios fenómenos donde la humedad relativa que permite la variación estacional y permanente humedad para sostener una amplia diversidad de plantas y animales.  Estos ciclos hacen de esta región una de las más húmedas, pero también una de las más sensibles y frágiles a los cambios climáticos.

La región está considerada en 10º. Lugar por endemismos en flora y se estima en la porción mexicana del Hotspot alrededor de 15,000 especies, aunque el Jardín Botánico de Missouri estima 17,000 especies con 3,500 endemismos; la diversidad de vertebrados no es menos impresionante ya que la diversidad de mamíferos es la segunda más importante en la lista de los Hotspots, con 521 especies que solamente es rebasada por los bosques de Nueva Guinea en África; de estas 210 especies son endémicas (40.3%), es el más alto de un radio de más de 50 especies en todos los Hotspots, de ellos 195 de las 521 especies son roedores.  Para la porción mexicana del Hotspots se estima un total de 437 especies de mamíferos, de los cuales 117 son endémicos (27%). En términos de diversidad de aves el número de especies residentes son 1,052 especies y 141 migrantes para un total de 1,193 segunda después de los Andes Tropicales.  Bird Life, un organismo internacional especialista en aves ha detectado 17 áreas endémicas de aves dentro del Hotspot Mesoaméricano.  

También es importante considerar que esta transregión es crítica para el paso de 225 especies migratorias de aves, y en donde se han registrado 3 de las 4 rutas migratorias del Hemisferio cercano en Mesoamérica, así como otras rutas migratorias, tales como la mariposa monarca.

La diversidad de reptiles es nuevamente extremadamente alta, el total de 685 especies la colocan en lo más alto de los Hotspot, de estas 391 especies (57.1) son endémicas.  La porción mexicana del Hotspot por si misma reporta 510 especies de las cuales 250 (49%) son endémicas; por esto, México es reconocido como el 2º sitio de mayor diversidad de reptiles después de Australia.

Así también la diversidad de anfibios es comparativamente impresionante con un total de 460 especies de los cuales 307 (66.7%) son endémicas, considerándose el 2º lugar en los Hotspot a nivel mundial, después de los Andes. La parte mexicana aporta 213 especies con 125 endémicas (59%) y 15 de los 53 géneros de anfibios se encuentran en el Hotspot de Mesoamérica.

Guatemala y Chiapas contienen una riqueza de Salamandras y se consideran el centro de origen y dispersión de las especies de salamandras tropicales, 40 especies se encuentran en esta región y 33 son endémicas.

En total se encuentran 2,859 especies de vertebrados, sin contar a los peces en esta región; considerando 1,159 especies de vertebrados que son endémicas (40.5%) esto lo convierte en el 2º. Hotspot después de los Andes tropicales, o sea el 2º. Dentro de los 25 mundiales, de hecho la hacen más diversa esta zona que 4 de los países megadiversos del planeta, a saber; Colombia, Brasil, Perú e Indonesia, todas ellas sustancialmente más grandes que la extensión del Hotspot Mesoamericano y solamente Australia con 6.7 veces más grande que Mesoamérica cuenta con una diversidad más amplia de vertebrados endémicos.