Tabasco, el primer lugar por robo con violencia

(EXCELSIOR) 

VILLAHERMOSA, Tab., 19 de mayo.— De acuerdo con datos oficiales, Tabasco es el primer lugar nacional en asalto con violencia; tercero en secuestro; y ocupa el octavo puesto en extorsión.

 

 

A los tabasqueños no sólo los roban, sino que, además, los secuestran, los lastiman de manera grave y los matan con total impunidad.

 

Analistas y ciudadanos tabasqueños consideran que más del 80% de los policías, de una u otra forma, están coludidos con la delincuencia común y el crimen organizado.

 

Estos expertos denuncian una realidad donde los cárteles de la droga tienen un gran negocio, junto a la confabulación de autoridades estatales: desde la frontera del municipio de Tenosique con Guatemala cobran miles de dólares por el tráfico de estupefacientes, armas y migrantes, y el secuestro de los mismos.

 

Gerardo Priego, responsable de la fundación Impulsa Tu Desarrollo y exdiputado del PAN, afirma que la delincuencia organizada “encontró una sociedad muy a favor del dinero, sin pedir explicaciones de dónde viene”.

 

Tabasco ocupa el quinto lugar en corrupción, según Transparencia Internacional, y su población “se abrazó” a la delincuencia y al dinero mal habido”, señala.

 

Además, comenta que el gobierno, junto con un “sistema judicial muy engrasado” permite que la entidad sea un paraíso para la delincuencia.

 

Ayer, Excélsior publicó el abandono que sufren los tabasqueños por parte del gobierno estatal.

 

Exportador de sicarios

 

Según datos oficiales, en el primer trimestre de 2015, la inseguridad en la entidad se ha disparado, con 448 atracos a casas habitación y 646 a comercios, donde el sector restaurantero ha sido el más afectado, y 55 robos de autos.

 

Además, Tabasco ocupa el segundo lugar en materia de robo y tráfico de ganado, cuando en otros tiempos era un emporio ganadero.

 

También llama la atención que estos números, procedentes del Sistema Nacional de Seguridad Pública, del Consejo Ciudadano de Seguridad Pública y Justicia Penal y Transparencia Internacional, ponen a Tabasco por encima de otras entidades “convulsas” como el caso de Tamaulipas o Michoacán.

 

Desde luego —señala Sergio Antonio Reyes, del Colegio de Abogados de Tabasco—, la ganadería está paralizada. Tenemos un contrabando muy fuerte de Guatemala, de todos los días. Aquí se trafica con seres humanos y con ganado, de Guatemala, y no lo pueden controlar. No hay la capacidad. El gobierno del estado ha dejado muchas de sus funciones en manos de la Federación.

 

Enfatiza que, además del derecho de piso, por ejemplo, los secuestros en contra de los tabasqueños “están a la orden del día” y contradice al actual secretario de Seguridad Pública del estado, Audomaro Martínez, quien afirma que ese delito ha disminuido.

 

“Los índices delictivos han continuado la tendencia alcista que traían arrastrando desde el sexenio anterior. No hay cambio”, apunta.

 

Gerardo Priego, quien también fuera diputado panista, está de acuerdo con la versión de que cuatro de cada cinco policías están coludidos con la delincuencia.

 

“Ellos son los que nos asaltan y nos secuestran, o la otra opción es que reciben dinero de la delincuencia para no agarrarlos; y, la tercera, reciben dinero de la delincuencia o están amenazados ellos o sus familias y total, el escenario es gravísimo porque ahí está la incapacidad tan manifiesta que tiene el gobierno para aliviar el tema de la seguridad”, refiere.

 

Por si fuera poco, este estado, que el cantante Chico Che considerara un edén, ahora es el primer exportador de jóvenes para convertirse en sicarios en todo el país, pues los tabasqueños no encuentran educación, empleo, o alguna forma de ganarse la vida de manera digna.

 

Uno de los principales factores que explica el disparo del crimen y la violencia a nivel local, aducen los críticos, es que los elementos policiacos y sus superiores ya son parte de la propia delincuencia.

 

“El problema es que quienes nos deberían cuidar son los que nos están secuestrando y son los que nos están asaltando. Y ante esa pasividad cómplice del gobernador y de su gabinete, pues hoy los tabasqueños estamos totalmente expuestos a esa delincuencia”, subraya Priego Tapia.

 

Ante el olvido del gobierno, los tabasqueños se organizan

 

Ante la situación de inseguridad en Tabasco, la sociedad no se ha quedado cruzada de brazos. Al contrario, tanto en el sector urbano como en el rural, la gente ha reaccionado y se está empezando a organizar para enfrentar al crimen, ante la complicidad o, al menos, la tolerancia del gobernador Arturo Núñez.

 

Para ello, además de los tres clubes de tiro autorizados, sólo en Villahermosa, hay por lo menos tres más que están funcionando semioficialmente, y a donde gran parte de la ciudadanía local, hombres y mujeres, están acudiendo para prepararse y defenderse de los delincuentes.

 

A la par, proliferan carteles en las carreteras, puentes, comercios o las mismas fincas ganaderas y agropecuarias del interior de Tabasco, en donde la población le advierte a los delincuentes que van a ir por ellos, y que ya no permitirá impunidad ni tolerará que el vacío de la autoridad la llenen con sangre de sus hijos. “Sobre advertencia no hay engaños. Los vamos a linchar”, manifiestan en las pancartas.

 

Ante ello, Gerardo Priego Tapia, responsable de la fundación Impulsa Tu Desarrollo y exdiputado del PAN, hace ver que este tipo de reacciones de los tabasqueños no las está tomando en cuenta Arturo Núñez, y afirma que la gobernabilidad no es el fuerte del mandatario estatal.

 

“De este seudo gobernador no se puede esperar absolutamente nada en términos de recuperación de la seguridad. Y es por eso que nosotros hemos empezado una campaña muy fuerte para provocar a la sociedad tabasqueña; que la sociedad se dé cuenta que, efectivamente, se tiene que organizar, y que tenemos que estar profesionalmente unidos, evitar los excesos e incrementar la eficiencia para protegernos, para protegernos todos”, asevera.