“A medias”, el boicot de evaluaciones docentes  

Por ENRIQUE GUTIÉRREZ Y MANUEL ZEÑAY

 

Tuxtla Gutiérrez.- Cuando parecía que el arranque de las evaluaciones docentes, como parte de la entrada en vigor de la Reforma Educativa, se llevaría a cabo en un ambiente de paz, la hostilidad reinó desde temprana hora del sábado pasado, cuando en las tres sedes para la aplicación de las mismas aparecieron maestros de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) y estudiantes normalistas, quienes intentaban impedir el paso a quienes intentaban efectuarlas.

 

El miedo empezó a cundir en la ciudad capital desde temprana hora, pues en el Instituto Tecnológico de Tuxtla, uno de los inmuebles donde se harían los exámenes, los manifestantes impidieron el paso a la mayor parte de “interesados” en contestar la evaluación; según fuentes extraoficiales, sólo 200 lograron ingresar.

Una valla de policías estatales y federales resguardaba la entrada principal de esta escuela y sus alrededores, e incluso hubo un lesionado en el intento de no permitir que la prueba se desarrollara. Por momentos, el clima era de “tensa calma”, pero subió de tono cuando un grupo de disidentes “secuestró” un camión de pasaje “Conejobús” y le prendió fuego en las inmediaciones de la escuela.

Además, el caos vial y la desesperación de los peatones eran más intensos. Algunos esperaban la llegada de su ruta de colectivo, pero al no saber para dónde cambiaron de manera forzosa la misma, tuvieron que caminar varios cientos de metros o hasta kilómetros para llegar a un lugar “seguro”.

 

SEGURIDAD “AL TOPE”

El sobrevuelo de los helicópteros de la Policía Federal era constante. De hecho, surcaban los cielos y casi “rozaban” los techos de las viviendas; asimismo, ambulancias de Protección Civil estaban listas para socorrer a los heridos, en caso de que los hubiera.

El gas lacrimógeno “lanzado” por los uniformados controló a quienes protestaban de forma más enérgica, lo que afectó también a vecinos de la zona; el miedo calaba cada vez más entre los vecinos y algunos transeúntes.

En la Universidad Valle de México (UVM), otra de las sedes de esas evaluaciones, la movilización estuvo más tranquila. Los cerca de 600 docentes que se mantenían cerca de la entrada principal de la misma, sólo esperaban cautelosos el momento exacto para interrumpir la evaluación. Sin embargo, un grupo de gendarmes llegó antes de que los inconformes cometieran algún acto “fuera de la ley”.

 

APLICADOR “AFECTADO”

Uno de los aplicadores de esas evaluaciones, quien pidió omitir su nombre por obvias razones, explicó que antes de salir de la Subsecretaría de Educación Federalizada (SEF), varios profesores lo interceptaron no sólo a él, sino a otros compañeros, y les quitaron algunas pertenencias como CD’s y documentos.

Además, refirió que incluso un reportero fue retenido al momento que intentaba tomar fotografías de los hechos. También especificó que una agrupación de protestantes persiguió a otros comunicadores, a fin de despojarlos de sus equipos de trabajo, en este caso cámaras fotográficas.

 

MARCHA NOCTURNA DE PROTESTA

Luego de las acciones que “sembraron el terror” por unas horas, la autoridad judicial controló la situación; no obstante, por la noche, cerca de 400 estudiantes, y algunos maestros, marcharon desde el Tecnológico Regional hasta muy cerca del Parque Central, en rechazo a la actitud de la autoridad que, manifestaban, era “represora”.

Armados con palos y machetes, los jóvenes externaban que no bajarían la guardia y que a pesar de que la Secretaría de Educación afirmó que en las tres sedes, incluida la Universidad Politécnica de Suchiapa, el 55 por ciento del total de aspirantes sí presentó el examen, es decir de los mil 20 que se inscribieron en el proceso 511 asistieron a evaluarse, no permitirán que se desarrolle a cabalidad.

 

Al final, los elementos policiacos detuvieron a varios “incitadores” por los hechos ocurridos no sólo en el Tec Regional, sino en Suchiapa, donde hubo enfrentamiento entre autoridades e inconformes.