Migración se abre paso en región zoque
En esta migración hormiga se ven hasta "500 caribeños diariamente", comentan los lugareños. Incluso, ya se les conoce como "la otra caravana".
Los caribeños transitan por la carretera del municipio de Ocozocoautla de Espinosa hasta llegar a Raudales Malpaso, en el municipio de Mezcalapa
Agencia El Universal
Malpaso
Después de la desarticulación de las caravanas que han salido de Tapachula, cientos de migrantes haitianos llegan a diario a esta localidad de la región zoque de Chiapas para continuar su camino al norte del país por la ruta de Las Choapas-Veracruz.
La estación de la que salen los autobuses a Veracruz y Quintana Roo es el punto de reunión de hombres y mujeres que se agolpan en la taquilla para conseguir boletos y salir de Chiapas.
Los caribeños transitan por la carretera del municipio de Ocozocoautla de Espinosa hasta llegar a Raudales Malpaso, en el municipio de Mezcalapa; un camino de 70 kilómetros que recorren a pie, porque taxis y otros vehículos les cobran hasta el triple de la tarifa normal.
En esta migración hormiga se ven hasta "500 caribeños diariamente", comentan los lugareños. Incluso, ya se les conoce como "la otra caravana".
El poblador Tomás Morales menciona que en este municipio no ha habido operativos contra los haitianos: "No los detienen, pero tampoco han recibido ayuda de las autoridades locales, si acaso hay algún apoyo del pueblo con comida o para pernoctar".
Un poco de ayuda.
Pobladores del ejido de Nuevo México, municipio de Villaflores, se organizaron para ayudar a los migrantes que pasan por su localidad y protegerlos de los abusos por parte de la policía, transportistas y dueños de los hostales.
Los habitantes solicitaron al comisariado ejidal habilitar el auditorio municipal como albergue, para que los migrantes puedan pernoctar y alimentarse.
"Juntamos para que los migrantes coman aquí, para que se hospeden durante su paso, ya que mucha gente está abusando de ellos", lamentó Gladys Vera, vecina del lugar.
Tramitan amparos
En Tapachula, más de 7 mil migrantes de Haití, Cuba, Venezuela y Centroamérica entregaron sus documentos a activistas de derechos humanos para tramitar un amparo que les permita abandonar esa ciudad y viajar en caravana a la capital del país, informó Irineo Mujica, activista de la organización Pueblos Sin Fronteras, quien agregó que el presidente Andrés Manuel López Obrador tiene que entender que estas personas son seres humanos que vienen por necesidad.
Pobladores del ejido de Nuevo México, en Villaflores, se organizaron para ayudar a los migrantes y protegerlos de los abusos por parte de la policía, transportistas y dueños de los hostales.