Recontratarán a personal eventual del Instituto Nacional de Antropología e Historia

Ante la protesta de la ENAH y especialistas, el instituto afina su política de austeridad

Agencia Excélsior

CIUDAD DE MÉXICO.

Ante la inquietud que generó una circular interna, que se difundió el sábado pasado en redes sociales, el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) aclaró ayer en un comunicado que “los trabajadores eventuales que laboraron en 2021, cuyas funciones y tareas estén plenamente justificadas y apegadas a los encargos sociales del INAH, serán recontratados en este 2022”.

Destacó que el documento “es un mecanismo de control del proceso de contratación del personal eventual que, en ninguna medida, implica recorte o despido de personal”.

Y ratificó: “Para el ejercicio presupuestal 2022 no está autorizada la contratación de más personal que el que laboró en 2021 y todas las recontrataciones deben contar con la autorización previa de la Coordinación Nacional de Recursos Humanos (CNRH)”.

Ulises Leyva, director de Medios de Comunicación del INAH, detalló ayer que la CNRH trabaja en la validación de la estructura laboral de cada centro de trabajo, por lo que no se descarta que este enero se autoricen la de varias dependencias. “Es cuestión de días”, dijo.

Ante la preocupación que manifestó el director de la Escuela Nacional de Antropología e Historia (ENAH), Hilario Topete, por la política de austeridad que los paralizaría, el vocero de Presidencia, Jesús Ramírez, aclaró en Twitter. “En la ENAH nadie será despedido; los eventuales que laboraron en 2021 serán recontratados. También los profesores de asignatura. Los que prestan servicios por honorarios, capítulo 3000, trabajarán como en 2021”.

Y Prieto señaló en esta red que estará pronto en la ENAH “para despejar inquietudes infundadas”. 

QUIEREN CONOCER A MECENAS 

Ante la nueva polémica surgida por las donaciones privadas para la reconstrucción del Foro Humboldt de Berlín, responsables de la política cultural en la capital alemana pidieron que se divulguen los nombres de los mecenas para la construcción de edificios públicos prestigiosos.

El Foro Humboldt, edificado en el emplazamiento del palacio real de los Hohenzollern y que incluye la fachada reconstruida del antiguo edificio, es considerado el proyecto cultural alemán más ambicioso del siglo XXI.

Las obras costaron unos 835 millones de dólares, de los cuales 105 millones fueron donaciones privadas.

El proyecto ha estado rodeado de debates. El más reciente es el relacionado con los mecenas, entre los que se encuentra el fallecido banquero Ehrhardt Bödecker, a quien se atribuyen comentarios antidemocráticos.

Ante las voces críticas, Wilhelm von Boddien, jefe de la comisión de recaudación de fondos para la restauración del antiguo palacio real de Berlín, respondió que su misión no era controlar a los donantes.

No soy un espía”, dijo. Y agregó que la presunción de inocencia también se aplica a las donaciones, aunque admitió que no aceptó todas las ofertas.

El director del Centro de Arte, Cultura y Ciencia, Hartmut Dorgerloh, que junto con el titular de Cultura de Berlín, Klaus Lederer, defienden una mayor transparencia en el mecenazgo, explica que hasta ahora la divulgación de los datos dependía de la decisión de los propios donantes.