EN LA MIRA 13/06/17

El lado oscuro del ICATECH y sus nexos con Mover a Chiapas

Por Héctor Estrada

Si bien los casos corrupción dentro de la gran mayoría de las dependencias del actual Gobierno de Chiapas son ya asunto de amplio dominio público, lo que sucede al interior del Instituto de Capacitación y Vinculación Tecnológica del Estado de Chiapas (ICATECH) es un tema que con el paso del tiempo ha puesto a la dependencia EN LA MIRA de las más profundas sospechas y suspicacias que parecen advertir irregularidades y operaciones turbias dignas de las investigaciones más municionas.

 

La conocida vinculación directa de la dependencia estatal con el Partido Mover a Chiapas y su intermitente dirigente, Enoc Hernández Cruz, ha sido punto medular de lo sucedido ahí desde 2013, cuando el propio Enoc Hernández fue designado por Manuel Velasco Coello como director general del ICATECH. El nombramiento (ocurrido sólo seis meses después de que Velasco tomara posesión) NO se trató de una decisión fortuita, los objetivos fueron claros desde el principio.

Y es que, para entender mejor los hechos es importante precisar el origen y la función de Mover a Chiapas dentro del régimen encabezado por Velasco Coello. La relación de Hernández Cruz (antes ligado al gobierno de Juan Sabines Guerrero) con Manuel Velasco inició desde antes de la campaña que llevaría a Velasco a la gubernatura. Los acercamientos, dicen algunos cercanos al ahora líder partidista, se dieron a través de Leticia Coello de Velasco, madre del actual gobernador y ex presidenta del Sistema DIF Chiapas.

Así, tras meses de insistencia, el ex militante del PT, Enoc Hernández, logró finalmente audiencia con Leticia Coello a quien le planteó el proyecto para la creación de un partido “satélite” para el gobierno de Velasco Coello, que permitiría evadir algunos candados electorales y disfrazar el monopolio del partido verde en Chiapas. Se comprometió a poner al servicio de Leticia Coello su capacidad de convocatoria u organización; y así fue como finalmente Mover a Chiapas vio la luz a principios de actual gobierno, bajo el absoluto madrinazgo político de la mamá del gobernador. 

Sin embargo, el nuevo partido político, creado de la nada, prácticamente de manera exprés, necesitaba financiamiento cuantioso si realmente se quería cumplir con los ambiciosos objetivos trazados. Ahí es donde el ICATECH fue perfilado por primera vez como medio idóneo para permitir el ingreso de recursos públicos. Por ello, el 16 de mayo de 2013 Hernández Cruz asumió la titularidad de la dependencia estatal como parte del nuevo gabinete verde.

Desde ese momento, los señalamientos sobre presuntas irregularidades respecto al engrosamiento de la nómina, inclusión de familiares o militantes a la plantilla laboral (de los que hablaremos en la siguiente entrega) y el desproporcionado incremento al presupuesto de la dependencia, dedicada a la capacitación en habilidades técnicas, artes u oficios, poco conocida hasta esa fecha, comenzaron a derramarse como cascada creciente. 

De 2013 a 2017 el presupuesto asignado al ICATECH pasó de 73 a 218 millones de pesos. Más que lo otorgado a coyunturales dependencias como el Consejo Estatal para las Culturas y las Artes (CONECULTA), la Secretaría de Pesca, el Instituto de Elecciones y Participación Ciudadana (IEPC), la Secretaría de la Función Pública, la Secretaría de Medio Ambiente e Historia Natura (SEMAHN), el Consejo de Ciencia y Tecnología del Estado de Chiapas y la mismísima Secretaría General de Gobierno; nada más y nada menos.

En 2013 el presupuesto para el instituto fue de 74 millones de pesos; en 2014 la cantidad pasó a 124 millones de pesos, es decir, tuvo un incremento exponencial del 80 por ciento; durante el 2016 se elevó a 130 millones, para finalmente alcanzar los 218 millones de pesos de este año, que ahora tienen a su plena disposición. Para el ICATECH ni siquiera los tiempos de austeridad y recortes presupuestales han sido problema para elevar su financiamiento gubernamental, aprobado formalmente por el Congreso de Chiapas, pero evidentemente instruido por el de ejecutivo estatal. 

Hernández Cruz es el único funcionario de la actual administración que se ha dado “el lujo” de dirigir en dos ocasiones la misma dependencia estatal, en menos de cinco años. El protegido de Leticia Coello ha ido y regresado de la pendencia para atender (en momentos coyunturales) al Partido Mover a Chiapas, dejando como “encargados del changarro” a personajes bajo su absoluto control, como es el caso del actual director general, Luis Rodolfo Moisés Ramírez, casualmente también militante de Mover a Chiapas e inscrito en las pasada contienda electoral dentro de la lista de diputados plurinominales por ese partido, según consta en documentos del propio Instituto de Elecciones y Participación Ciudadana (IEPC).

El caso del ICATECH aún tiene más recóvenos de irregularidades latentes que en las siguientes entregas abordaré. Se trata de asuntos que exigen a gritos investigaciones profundas donde los engañosos contratos con “proveedores convenientes” que podrían dar luz a tantas sospechas legítimas. Finalmente, hoy existe ya un grupo de personas en plena investigación, muy interesadas en el tema, mediante las instancias correspondientes, que pronto podrían corroborar lo que a todas luces parece evidente… así las cosas.