Chiapas, con gran potencial para construir con bambú  

Por ENRIQUE GUTIÉRREZ

 

Tuxtla Gutiérrez.- La entidad chiapaneca tiene el potencial suficiente para implementar el bambú como materia prima para la construcción de viviendas; de hecho, en municipios como Reforma, ubicado en la región socioeconómica Norte, hay una empresa que cuenta con 700 hectáreas para producción de esa especie, por lo que es cuestión de afinar algunos aspectos para que más constructores se interesen en el tema, consideró Antonio Giraldo, especialista proveniente de Colombia.

 

Durante una conferencia como parte del Congreso Internacional de Infraestructura Sustentable, celebrada en un hotel de esta ciudad, aclaró que dentro de esos puntos básicos a desarrollar en la entidad está la normatividad, pues en México no existe para ese tipo de edificaciones con dicho material.

Resaltó que la plantación de bambú gualba en el municipio chiapaneco es la más grande en el mundo, e incluso mayor que la del país cafetalero a pesar de que éste es pionero en ese tipo de obras, “hay suficiente pero no en lotes tan grandes”.

El constructor de la palapa más grande del planeta –con 44 metros de diámetro- construida de bambú en el estado de Morelos, reconoció que a nivel internacional los líderes en producción del mismo son los chinos, menos en construcción, “pues en ésta nosotros llevamos la cabeza, y nosotros le enseñamos a hacer ese tipo de obras”.

Afirmó que la inversión es equiparable a tener una compañía maderera: “Tienes que contar con las plantaciones, hacer la planta, el equipo, y lo mismo pasa con el bambú, y ya de esa forma iniciar su comercialización”.

Radicado en Puebla desde hace un lustro, comentó que además trabaja en la fabricación de maquinaria para la transformación del bambú en laminados, “de hecho nosotros nos encargamos de llevar el material a Morelos, donde se hacen construcciones de gran envergadura”.

El proyecto ha tenido gran éxito, refirió; por lo que ahora ingenieros de Chiapas se interesan en introducirse en ese tipo de innovaciones sustentables, para “no hacerle más daño al medio ambiente”.

Especificó que el sistema de reproducción y crecimiento del bambú es distinto, a diferencia de las maderas, “son gramíneas, es decir pastos, los podemos cortar y rebrotan, mientras que los otros los tenemos que sembrar cada que los maderamos”.

Aunque puntualizó que los proveedores mexicanos son pocos, trabajan con calidad, “han adquirido un conocimiento importante, tienen tecnología buena y aprenden a manejar su propio material”.

 

Las ventajas de implementarlo, dijo, son varias: Resiste a los movimientos telúricos, además de que cuando la temperatura ambiente es calurosa, en un hogar se mantiene fresco, o viceversa.