¡Viva la Champions! Liverpool y PSG dan partidazo

El conjunto inglés salva de último minuto la victoria, después que los parisinos empataran en un encuentro lleno de emoción  

Nota y foto: Excélsior

CIUDAD DE MÉXICO.

Con el arranque de la Champions League, los aficionados serán los más felices… después del Liverpool, que esta tarde dio cuenta del Paris Saint-Germain por 3-2 en un partidazo que se tuvo que decidir hasta los últimos minutos.

 

El héroe se llama Roberto Firmino, quien al minuto 91 puso el gol de la victoria para los ‘reds’, que antes se habían ido arriba en los cartones por medio de Sturridge y Henderson, pero que fueron empatados con las anotaciones de Meunier y Mbappé.

El partido arrancó con 15 minutos de dominio casero, con el arquero Alphonse Areola interviniendo en varias ocasiones. Mientras tanto, Kylian Mbappé y Neymar se encontraban aislados. 

No obstante, cuando llegó el PSG lo hizo con mucho más peligro. Neymar, tras una combinación con Di María, resolvió con un disparo seco que no atrapó Alisson y el rechace, a trompicones de Cavani, sí lo embolsó el portero brasileño.

La ocasión animó y volteó el encuentro, que comenzó a tener como dueño a los franceses, pero cuando más cómodos estaban los parisinos, se desgarró la defensa francesa.

En el minuto 30, Andrew Robertson encontró un hueco en la zaga del PSG y encontró a Sturridge, hasta ese momento prácticamente inadvertido, que cabeceó y firmó el 1-0 par los de Klopp.

Al PSG se le vino encima Anfield y Juan Bernat pecó de inocente y puso una zancadilla a Georginio Wijnaldum dentro del área que el árbitro señaló, y con razón, como penal.

Milner, con el brazalete de capitán, asumió la responsabilidad y, pese a que Areola le adivinó el lado, el balón se coló raso y fuerte pegado a un palo.

Di María, muy activo en los primeros 45 minutos, puso el balón en el área, Edinson Cavani no pudo controlarlo y Robertson, incomprensiblemente, despejó mal dejándoselo muerto a Meunier. El belga no desaprovechó el regalo y sacó un latigazo clavado al palo de la portería de Alisson.

La electricidad de la primera parte fue cortada de lleno por el descanso, que apaciguó a los dos equipos y redujo una marcha el encuentro.

Sin ocasiones claras en ningún bando, a los 12 minutos de la segunda parte le fue anulado un gol a Mohamed Salah, después que Sturridge se lanzó para alcanzar un balón adelantadp, pero chocó con Areola y le clavó los tacos en el cuerpo.

El Liverpool perdonó, y Neymar y Mbappé, inofensivos hasta los minutos finales, aprovecharon el negro partido de Salah para empatar.

El egipcio erró en la salida, regaló el balón a Julian Draxler y éste vio la cabalgada de Neymar por el centro. El brasileño condujo el esférico con sobriedad y encontró a Mbappé dentro del área, que fusiló a Alisson y puso el 2-2.

El francés iba a ser el causante indirecto de la derrota de su equipo por un exceso de confianza imperdonable: intentó tirar un caño, no lo consiguió y regaló la pelota al Liverpool, la pelota llegó a Firmino, tiró un amago a Marquinhos y definió con un tiro cruzado para desatar el éxtasis en Anfield.

Con este triunfo, el actual subcampeón de la competencia manda el Grupo Ccon tres puntos, por encima del Estrella Roja de Belgrado y el Nápoles -ambos con un punto- y el PSG, que se quedó sin unidades.