Sujeto asesina a su pareja y a su hijastra

Al parecer por un arranque de celos

 


Enrique Vázquez Palacios

Tuxtla Gutiérrez


Motivado por un arranque de celos y hallándose bajo los efectos del alcohol, un sujeto identificado con el nombre de Ernesto C. de A., de 46 años, asesinó a golpes y varillazos a su amasia de nombre Luisa E. C., de 29; mientras que su pequeña hijastra, Adela C. E., de tan solo 4 años, fue hallada sin vida flotando dentro de una cisterna.

De acuerdo con el reporte de las autoridades, se sabe que los hechos ocurrieron la noche de este martes en el interior del domicilio marcado con el número 1392 de la calle Pomarrosa y Avenida Ciprés de la colonia Albania Baja de esta capital, donde a decir de vecinos, comenzaron a escuchar gritos y llantos provenientes de la casa y poco después vieron salir corriendo al sujeto, al que lograron detener cuando pretendía darse a la fuga.

Tras el arribo de la policía y paramédicos de Cruz Roja, hallaron el cuerpo sin vida de la joven Luisa, en medio de un charco de sangre y con huellas de golpes y heridas provocadas al parecer por arma blanca; mientras que al realizar la búsqueda de la pequeña Adela C. E., encontraron su cuerpo flotando dentro de una cisterna.

Las autoridades dieron a conocer que de acuerdo con sus primeras declaraciones, asistido por un perito traductor; el feminicida, de origen tseltal y originario del municipio de Sitalá; dijo haber asesinado a su pareja “por problemas de celos” y que ese fue el motivo por el que comenzaron a discutir, llegando al grado de golpearla con una varilla y luego con una bomba de agua que le estrelló en la cabeza hasta privarla de la vida.

Señaló que al momento de la agresión, la pequeña también murió debido a los golpes recibidos y que para tratar de ocultar su crimen, la arrojó a una cisterna del patio de la casa, para después tratar de darse a la fuga, pero fueron los mismos vecinos quienes lograron detenerlo.

Cabe señalar que al momento de su detención, al sujeto le fue asegurado un costal donde llevaba un pantalón, camisa y sandalias con manchas de sangre, que eran las prendas que vestía al momento de cometer sus crímenes y que pretendía ocultar tras haberse cambiado de ropa antes de ser detenido por los vecinos del lugar, quienes dijeron a las autoridades que la pareja, junto con la pequeña, tenían aproximadamente dos semanas de haber llegado a vivir a ese lugar.