Una maleta con 20 kilos de Cocaína

Por: Mtro. Julio César Cué Busto

El día 7 de agosto del 2015 se logró la liberación del universitario Óscar Álvaro Montes de Oca Rosales, supuesto propietario de una maleta en la cual policías federales en la madrugada del 1 de agosto de la misma fecha, detectaron la presencia de 20 kilos de cocaína en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México, por lo que tras ser detenido Montes de Oca Rosales fue trasladado a la Subprocuraduría Especializada en la Investigación de Delincuencia Organizada (SEIDO), para tras tomarle su declaración ministerial, posteriormente ser internado en el Centro Federal de Readaptación Social número 4 “Noroeste” con sede en el poblado “El Rincón”, del municipio de Tepic, Nayarit a disposición del Juez Federal  correspondiente.

 

Este egresado de la Universidad Autónoma del Estado de México (UAEM) retornaba de la ciudad de Buenos Aires, Argentina, en la Aerolínea Avianca, vuelo con escala en las ciudades de Lima, Perú y Bogotá, Colombia; el cargo que le impuso el Agente del Ministerio Público Federal fue la transportación de veinte kilogramos de cocaína, en la modalidad de introducción de estupefacientes al país que tiene una pena de diez a veinticinco años de prisión, de acuerdo con el artículo 194, fracciones I y II del Código Penal Federal.

Para fortuna de este egresado de la Universidad Autónoma del Estado de México, fue un alumno de excelencia y estimado por sus compañeros y personal docente, por lo que se movilizaron para protestar ante el absurdo de quererlo relacionar con un delito de drogas, lo que provocó que las autoridades universitarias y las del gobierno del Estado de México, como fue el caso del Rector de la UAEM, el Doctor en Derecho Jorge Olvera García, y el Lic. Eruviel Ávila Villegas, Gobernador Constitucional del Estado de México, enarbolarán la más enérgica protesta por los mencionados hechos, y exigieran a la Procuraduría General de la República la liberación inmediata de Óscar Álvaro Montes de Oca, lo que aconteció como ya se dijo el día viernes 7 de agosto del 2015, la campaña fue #OscarEsInocente.

En hechos similares fue la detención de la Maestra Ángel de María Soto Zárate, la cual fue acusada el día 13 de julio del 2013 de ser dueña de una maleta que fue detectada también en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México, en cuyo interior encontraron 10 kilos de cocaína. Ángel de María de 23 años regresaba al intentar ir a una Jornada Mundial de la Juventud que encabezaría el Papa Francisco en Brasil con escala en la ciudad de Lima, Perú, pero al extraviar su pasaporte en esta ciudad se regresó a México.

Al regresar al Distrito Federal, la maleta de la Maestra Soto Zárate no apareció y la estuvo reclamando; después de un rato, le avisaron que había aparecido y cuando fue a recogerla ella les dijo que esa no era su maleta, lo cual no les importó a los policías y la detuvieron poniéndola a disposición de la Agencia del Ministerio Público Federal que se encontraba en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México, en donde fue remitida acusada de delitos contra la salud al área femenil del penal de mediana seguridad de “El Rincón” en Tepic, Nayarit, Cefereso 4 “Noroeste”.

El caso de la Maestra Soto Zárate fue similar pero diferente al de Montes de Oca Rosales, ya que para éste el apoyo mayoritario fue universitario, y para la Maestra por pertenecer ella a la comunidad católica “Incienso de Dios”, la participación en las redes sociales fue fundamentalmente religioso el movimiento, eso no quita, también la participación importante en ambos casos de la sociedad en general.

En el caso de la Maestra la campaña en las redes sociales se denominó #liberÁDMe, fue tan fuerte el movimiento que rebasó la instancia nacional llegando a países como Ecuador, Nicaragua, Canadá, Brasil, Guatemala y Estados Unidos y también a países de Europa.

Otro suceso parecido, fue el del Contador Ernesto de la Torre Carbajal en noviembre del 2013, sin entrar en detalles fue casi calcado el incidente con el de la Maestra Soto Zárate; pero tratemos el caso de Lilia Angélica López Negrete, esta mujer de profesión bailarina fue detenida el 31 de diciembre del 2014 en el Aeropuerto de la Ciudad de México, tras detectarle 3 kilos de cocaína en su equipaje, esta persona no ha contado con los apoyos que contaron los casos anteriormente relatados, y eso es lo que verdaderamente puede causar pánico, no hay que confundir lo que expongo, pero la justicia no puede quedar expuesta al mayor o menor empuje de un reclamo social.

Qué hubiera pasado si Oscar Álvaro Montes de Oca Rosales no hubiera sido un alumno de excelentes calificaciones, de conducta ejemplar, de compañerismo incomparable; ¿seguiría hoy en día en el infierno al no contar con los apoyos extraordinarios que representaron las quejas que expusieron las insignes autoridades y la sociedad en general?

Qué hubiera pasado si la Maestra Ángel de María Soto Zárate, no hubiera pertenecido a una organización religiosa, que su conducta no hubiera sido de cualidades extraordinarias, reconocida por todos; ¿estaría actualmente dejando pasar los días en una celda con compañeras delincuentes?

No debe decidirse si la bailarina Lilia Angélica López Negrete es inocente o no de acuerdo con los apoyos de redes sociales o extraordinarios que exijan su libertad, insisto espero no me malinterpreten, festejo que Oscar Álvaro y Ángel de María estén libres. Pero faltan muchos más. Los reclusorios del país están llenos de inocentes que no tuvieron esa oportunidad de defensa y están condenados a sufrir en la más absoluta impunidad el abandono total de la justicia y la legalidad; el derecho penal es un fracaso y la reforma penal del 2008, es apenas un pequeño cimiento, falta mucho por hacer, mucho más.