HOSPITAL DEL ALMA
Por El Duque de Santo Ton
(Consultas gratis: [email protected])
Querido Duque de Santo Ton:
Estudio derecho en una universidad de Tuxtla, tengo 20 años y me gusta hacer que la mujer disfrute al máximo en la cama, les cumplo sus más íntimas fantasías sexuales, me encanta utilizar juguetes para que la dama llegue al más completo clímax. No cobro ni me enamoro, sólo lo hago por placer. Te pido que si te escribe alguna interesada le pases el número de mi celular. Yo soy blanco, mido 1.70, estoy bien dotado y tengo los ojos de color.
Martín
Tuxtla Gutiérrez
Querido Martín:
Gracias por incluir fotografías en el mensaje, pero no puedo publicarlas por políticas de la empresa. Si alguien me pregunta por ti, ten la seguridad que le daré tu número de teléfono, tu número de serie y hasta tu código de barras.
Duque de Santo Ton:
Voy a ir a una Noche Mexicana en una casota de la colonia San Patricio. Dicen que va a estar muy elegante porque puro político va a ir y a las señoras se nos pidió que fuéramos vestidas con trajes típicos ¿De qué me sugieres que vaya?
Brenda
Tuxtla Gutiérrez
Querida Brenda:
Puedes ir vestida de la típica arribista social.
Querido Duque de Santo Ton:
Me llamo Juan José y desearía encontrar amistad sincera y desinteresada para relación seria con hombre gay, maduro de mentalidad e ideas, con valores, que crea firmemente en la amistad, en la complicidad, que busque paliar su soledad. Yo, maduro de 47 años, residente en Tuxtla Gutiérrez, amante de la tranquilidad, la música, la cultura, la naturaleza, etc. Detesto la hipocresía y la mentira, busco un hombre similar a mí (no bisexual ni casado). Yo estoy soltero y quiero alguien comprensivo y tranquilo como yo. Soy español y me gustaría encontrar a un hombre de mi país, para conocernos en persona. No busco relaciones virtuales sino reales.
Juan José
Tuxtla Gutiérrez
Querido Juan José:
Se me hace que eres muy exigente y que obtendrás poca respuesta a tu petición. Mejor salieras a caminar al parque de Santo Domingo de madrugada, tal vez ahí encuentres a tu alma gemela.
Hola Querido Duque:
Tengo 50 años de edad y toda mi vida he sido solitaria. Cuando consigo hacer algunas amistades, me canso de ellas muy rápidamente o termino por cansarlas a ellas. Es que no se si yo elijo mal a las amistades porque muchas veces me aburro, no tenemos intereses comunes, terminan odiándome porque piensan que soy una alzada. El grupo de amigas que tengo se ha vuelto muy aburrido y siempre que nos juntamos para no caer en la monotonía me gusta hablar mucho, contar anécdotas, o contar chistes o mostrar memes o esas cosas y a algunas señoras del grupo, eso les cae muy gordo.
Doris
Tuxtla Gutiérrez
Querida Doris:
Si naciste sangrona no hay remedio.
Duque:
No puedo explicar lo que me pasa pero es triste. Intenté suicidarme pero mis problemas emocionales perduran y se han agravado con lo del temblor. Yo sé que el problema está en mí. Mi madre quiere llevarme a la Ciudad de México, porque dice que mi mal no tiene cura; además de que tengo problemas graves, físicos y mentales. Esta vida no es vida.
Gilberto
Tuxtla Gutiérrez
Querido Gilberto:
Sí es vida, pero estás enfermo. Si bien es cierto que yo también creo que jamás se te quitará lo loco, existen alternativas para no sufrir tanto. Aunque son muy caros, los medicamentos ansiolíticos y antidepresivos hacen milagros. Lo malo es que hasta para los ricos el precio de los tratamientos es excesivo.
Querido Duque:
Tengo 30 años de edad, y desde que cumplí 9 hasta los 15, sufría “accidentes” en la cama. Amanecía orinado y mi mamá siempre me decía que yo era un cerdo. Hoy en día me causa placer de vez en cuando orinarme a propósito en la cama. Por fortuna vivo solo en un departamento. Me encanta despertar de madrugada con la vejiga llena, y vaciarla ahí mismo, luego quedarme dormido otra vez y despertar al día siguiente bien mojado.
José María
Chiapa de Corzo
Querido José María:
Estoy de acuerdo con tu madre, eres un cerdo.
Querido Duque:
Mi papá nunca está conmigo porque es uno de los hombres más ricos de Chiapas y se la pasa haciendo negocios. Mi mamá se la pasa viajando con sus amigas pero a mí eso no me importa porque es medio estúpida y sumamente superficial, como suelen ser las mujeres estúpidas. Normalmente estoy sola en nuestra gran casa, en la que literalmente me pierdo. Prácticamente vivo sola con las criada, ellas son como mi familia. Mi nana es como si fuera mi madre, ya que ella me crió. Procuro no romper demasiado las barreras para que no se vayan a igualar pero la verdad es que quiero mucho a las muchachas que trabajan en mi casa ¿es malo?
Scarlett
Tuxtla Gutiérrez
Querida Scarlett:
Si sigues encerrada, rodeada de sirvientas, no te vas a casar o vas a tener que comprar un marido pelagatos. Por mucho que las quieras, tus empleadas son tan solo eso: tus empleadas.
Querido Duque:
A mí me educaron en la Fe Católica y por eso sufrí mucho cuando me casé, porque lo hice con un hombre divorciado, así que no pude casarme por la Iglesia. Han pasado quince años y, la verdad, ya no soporto mi matrimonio, he decidido divorciarme, y mi madre me dice que los católicos no nos divorciamos, pero si así están las cosas, para la Iglesia yo no estoy divorciada y mis hijos son bastardos, por lo que no me afecta en nada divorciarme por lo civil.
Carmela
Tuxtla Gutiérrez
Querida Carmela:
Tienes toda la razón. Para la Iglesia Católica, tú vives en concubinato y ese divorcio es inocuo porque en realidad nunca has estado casada ante Dios.
Duque de Santo Ton:
Tengo 22 años y mi mejor amigo tiene 19. Nos conocemos desde hace cuatro años y aunque al principio no nos hablábamos mucho con el tiempo empezamos a conocernos más y tener mucha confianza, incluso hasta saludarnos y despedirnos con un abrazo, o hasta decirnos: te quiero. Al principio todo era normal, tranquilo. A veces salíamos a caminar juntos, tomábamos un café y nos sentábamos en un parque a conversar. Me platicaba de él, de sus novias, de las chicas que besaba en una noche. De mí, muy poco, tampoco tenía muchas cosas que contar sentimentalmente y en general, soy cerrado. Y yo pensé que todo estaba dentro de la amistad y normal, hasta que un día tuvimos una conversación un tanto tensa porque le había sugerido ver una película juntos y me dijo que eso solamente lo hacen las parejas. Eso me molestó porque se lo había sugerido para pasar el tiempo y aprovechar que ninguno de los dos la habíamos visto. Después de esa conversación nos dejamos de hablar tres meses aproximadamente. Cuando nos contentamos, él me abrazo y lloró. Siento que hay una atracción mutua, pero no sé, tal vez me gusta, pero no creo ser gay.
Javier
Tuxtla Gutiérrez
Querido Javier:
Por lo que me escribes intuyo que eres un hombre sensible, cariñoso, considerado y putísimo.