HOSPITAL DEL ALMA

Por El Duque de Santo Ton

(Consultas gratis: [email protected])

 

Querido Duque:

Mi novio, que es uno de los solteros más codiciados de todo Chiapas, me pidió que me casara con él por todo lo alto, con 1200 invitados, en el casco de una finca que tiene por La Concordia. Yo le expliqué que soy de origen humilde y que mi familia no podría aportar casi nada al matrimonio, y él me dijo que no fuera bruta, que mi familia no iba a poner ni para comprar las coca colas, porque todo lo pagaría el Erario Público, incluyendo mi traje nupcial y la luna de miel en Tailandia. Mi papá está feliz porque dice que soy la única de sus hijas que ha conseguido un buen partido. Sin embargo, a mí hay algo que no termina de gustarme ¿será el miedo a la felicidad del que habla Erich Fromm?

Alicia

Tuxtla Gutiérrez

 

Querida Alicia:

Más bien es la culpabilidad de hacer planes con dinero ajeno; tu boda se pagará con dinero del pueblo y eso además de ser vulgar carece de principios éticos, a cualquiera le daría vergüenza…  si la tuviera.

 

Duque de Santo Ton:

Me enviaron por E Mail un video casero en el que se ve a mi señora haciéndole sexo oral a su instructor de tenis. Independientemente de las implicaciones morales de la grabación, y de los efectos destructivos que tiene sobre mi matrimonio, yo no me he separado de ella ni le he reclamado nada, para no dañar la estabilidad emocional de mis hijas con un pleito tan desagradable. Sin embargo, la otra noche, en una fiesta, mi mujer me quiso dar un beso en la boca y yo no me dejé, porque me vino a la cabeza la imagen que me llegó por Internet. Después ella me reclamó por el desaire, pero de todas maneras no quise decirle el motivo.

Braulio

San Cristóbal

 

Querido Braulio:

A veces al besar a una mujer, nos queda la duda de lo que pudo haber tenido horas antes en la boca. En tu caso estás seguro, así que no seas cochino y finiquita esa relación enfermiza con un divorcio amigable pero en el que repercutan las lúbricas prácticas amatorias de la dama con su instructor deportivo.

 

Querido Duque:

Soy una chava de casi 17 años y nunca me ha besado ninguno de los muchachos que me gustan,  a pesar de que he salido con dos de ellos. Estoy empezando a pensar que tengo algo. Me han dicho que soy bonita, soy educada, limpia y me siento a gusto con los esos dos muchachos y me doy cuenta que ellos también conmigo ¿cuál será mi problema?

Florencia

Tuxtla Gutiérrez

 

Querida Florencia:

Seguramente tienes mal aliento, es un defecto del que el último en darse cuenta suele ser el que lo padece. Consulta con tu dentista, por lo general es algo muy fácil de corregir y a ti te está estorbando. 

 

Querido Duque:

Tengo un amigo que además de parecer nevero es medio ignorante, pero le acaban de dar un puesto medio en el gobierno y ya se siente secretario de estado. Hace poco me burlé de él por un comentario que hizo en el Twitter y desde entonces no me habla, prácticamente me ignora. Sé que está molesto y quiero hablarle para pedirle que me disculpe pero no sé cómo ni qué palabras usar.

Carlos

Tuxtla Gutiérrez

 

Querido Carlos:

Si piensas que debes disculparte con tu “amigo” solamente porque tiene un puesto importante, o medianamente importante, tu amigo tomaría esa disculpa como una lamida de testículos, lo cual te colocaría todavía en una situación más vil ante sus ojos. Mejor deja que al señor licenciado se le pase el coraje o se le pase el puesto, ninguno de los dos son eternos.

 

Querido Duque de Santo Ton:

Tengo 29 años. Hace ocho años les confesé a mis padres que soy homosexual. Desde luego que la impresión fue fuerte y la reacción también, pero poco a poco la tormenta amainó y ellos se conformaron. Meses después conocí a mi compañero desde entonces y se los presenté y ellos lo aceptaron y los visitábamos con cierta frecuencia. Otras veces los visitaba yo solo. Hace algunos meses me llamó mi papá a la casa para decirme que mi mamá y él ya no quieren que mi compañero y yo vayamos más a su casa, que si sus vecinos se enteran que tienen un hijo homosexual y que tiene una pareja, serán el hazmerreír y los criticarán mucho, y ellos no van a soportar sus miradas. Estoy devastado. Mi compañero y yo somos personas serias, jamás hemos hecho un escándalo, nos comportamos con propiedad delante de la gente, nuestras amistades nos reciben con gusto y afecto. No comprendo la vergüenza que sienten ahora mis padres y tampoco que me estén echando de su vida. He tratado de convencerlos de su error, pero no he podido lograr nada. Dicen que su decisión está tomada y que no desean discutirlo más. He gastado mucho dinero en terapia psicológica tratando de lidiar con esta pérdida. Hablé con mi hermano y me dijo que habiendo puesto a mis padres en el “dilema” de tener que aceptar que uno de sus hijos es homosexual, debo entender sus temores. Esto me está destruyendo. Tengo problemas para dormir en la noche y te agradecería mucho que me aconsejes qué hacer.

Leonardo

Tuxtla Gutiérrez

 

Querido Leonardo:

La vida pasa y hay que disfrutarla. Dale gracias a Dios que tienes una pareja estable, que eres autosuficiente y que no tienes por qué dar cuenta de tu vida privada a nadie. Lo gay no se te va a quitar jamás ni tu familia lo entenderá, así que deja a tus padres y a tus hermanos vivir su vida como les plazca y si no te quieren en ella, no te les encajes. Si tienes problemas para dormir, pide a tu médico de cabecera que te recete unas buenas píldoras para conciliar el sueño, concéntrate en tus nuevos afectos y a tirar para adelante porque uno nunca sabe lo que pueda pasar cuando menos te lo esperes. Vive el momento.

 

Duque:

A pesar de ser divorciada, me invitan a muchos eventos sociales, entre ellos a las bodas. A mí me gusta acudir a esas invitaciones. Y cuando se trata de ir a la iglesia procuro llegar temprano para ocupar un buen lugar, es decir adelante y en la orilla del pasillo, donde pasan los novios o quinceañeras, para verlos bien. Pues bien, van dos veces que, estando yo sentada en la orilla de la banca en la iglesia, llegan parejas y la señora me pide que “me corra” para sentarse ellos en la orilla. La primera vez me agarraron desprevenida y lo hice, pero la segunda vez les dije que se pasaran en medio. Ella me vio muy feo, pero no hice caso ¿fue desconsiderado de mi parte?

Ema Rosa

Tuxtla Gutiérrez

 

Querida Ema Rosa:

Las personas que no quien perderse detalle de las ceremonias, procuran llegar temprano para ocupar un buen asiento, aunque no deja de ser de mal gusto que las mujeres solas de cierta edad asistan a ese tipo de actos, ya sean solteras, separadas, viudas o divorciadas. Una dama siempre debe tener un caballero a su lado y punto. Si no tienes acompañante mejor quédate en tu casa en lugar de andar dando lástimas.