Barack Obama busca calmar a sus aliados del Golfo tras el acuerdo nuclear con Irán

(LA NACION)

WASHINGTON.- El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, recibió hoy en su residencia de Camp David a representantes de países árabes aliados para disipar sus temores sobre la seguridad en la región tras el acuerdo nuclear con Irán.

 

 

Junto con Israel, los seis países del Consejo de Cooperación para los Estados Árabes del Golfo (CCEAG), Bahrein, Kuwait, Omán, Qatar, Arabia Saudí y los Emiratos Árabes Unidos, son los que más críticos han sido respecto del acuerdo entre Estados Unidos e Irán.

 

Si bien el encuentro pautado para hoy fue anunciado como una cumbre de líderes, sólo dos de los países, Kuwait y Qatar, enviaron a sus jefes de Estado. El resto no concurrió alegando distintos motivos, lo cual fue interpretado por algunos analistas en Washington como un desaire a Obama.

La Casa Blanca también intentó bajar el tono al desaire diplomático sufrido cuando el rey saudí, Salman bin Abdulaziz, decidió no concurrir a Camp David y enviar en su lugar al príncipe heredero.

 

Ayer, Obama ya se había reunido a cenar con los representantes de los seis países árabes en la Casa Blanca. Para el día de hoy estaban pautados, además de las reuniones de trabajo, un almuerzo y una conferencia de prensa de Obama.

 

En las reuniones se abordaron la lucha contra los rebeldes hutíes en Yemen y contra la milicia Estado Islámico (EI) en Irak y Siria, además de la situación de caos en Libia.

 

Los aliados del Golfo esperaban obtener garantías especiales en vista de la amenaza terrorista en la región y de lo que consideran actividades desestabilizadoras de Irán. Estados Unidos intentará llevarles confianza pero no ofrecerá un tratado formal de seguridad, aseguraron fuentes de la Casa Blanca, sin dar más precisiones.