Sismo del “7S” causó la disminución de agua

Estudio completo estaría listo en casi 3 semanas, afirma la Conagua

Descartan especialistas acción provocada por zapatistas u otras personas; fue algo natural, subrayan

 

 

Por ENRIQUE GUTIÉRREZ

Tuxtla Gutiérrez

 

Luego de realizar unos estudios el pasado fin de semana, como un informe preliminar se observó que la reducción del nivel de los caudales de las Cascadas de Agua Azul, municipio de Tumbalá, se debe a un azolvamiento importante del afluente y a algunas “ventanas” abiertas que provocan que el agua se desvíe, producto de factores como la deforestación y el mismo terremoto del pasado 7 de septiembre.

En conferencia de prensa, Gabriel Limón, delegado de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), refirió que encontraron esos hoyos a lo largo de 200 metros del cauce, lo que provoca que el agua se desvíe, además de que presenta un azolve (árboles, rocas, tierra) de al menos un kilómetro donde se presentan los descensos de niveles del afluente de hasta el 85 por ciento.

Dijo asimismo que hubo una baja de por lo menos .6 metros (60 centímetros) en el cauce, “se determinaron con precisión las coordenadas donde está el punto de desvío, lo que provoca que haya menos surtimiento del agua”.

Aclaró que de hecho ya tienen planes de lo que harán para solucionar la problemática, “pero en sí éste estará listo en 20 días, para lo cual nos uniremos la Conagua, Conanp, PC, la Secretaría de Obras Públicas, y la Subdirección General Técnica de la Ciudad de México”.

Dijo que se buscará asegurar el aprovechamiento sustentable de los ecosistemas a fin de evitar la erosión y degradación de los suelos, además de guiar las acciones para recuperar las cuencas hidrológicas de las Cascadas de Agua Azul, “hay que dejar algo en claro, la disminución del caudal se debe a un fenómeno natural”.

Es decir, detalló que hubo varios factores como: la modificación de los caudales derivado de las divagaciones de los brazos del río formativo de la misma, proceso que fue acelerado por la erosión en las márgenes del cauce, así como por el terremoto del pasado 7 de septiembre.

“Este evento provocó el colapso de las oquedades superficiales de la formación rocosa… es decir que las rocas que sostenían el sector se rompieron, y hubo una modificación natural del cauce”, detalló.

Por su lado, Adrián Méndez, titular de la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp), resaltó que la disminución del caudal sin duda está relacionada con la deforestación cuenca arriba, “esto no será una solución inmediata, es de mediano y largo plazos, la afectación lleva años”.

Por ello, señaló, requieren de la participación de las comunidades locales, para llegar a acuerdos por cuestiones de uso de suelo y la vegetación que está allí, “por eso necesitamos ese tiempo, es posible recuperar el sitio, pero necesitamos la voluntad”.

Dejó en claro que esa advertencia se hizo desde hace tiempo, es decir que alertaron sobre una afectación en esa zona, “pero esto es un llamado para que nos unamos, y resolvamos esto y que no se repita”.

Tras comentar que colocarán estaciones automatizadas para una mejor vigilancia, descartó además que en la afectación hubiera injerencia de zapatistas, “socialmente ahí no hubo un conflicto para que se desviara el agua”.