Claroscuros en obra “irregular” de Los Laureles

PC Municipal acepta que hay un dictamen de riesgo y que han atendido a los colonos inconformes, aunque estos últimos piden frenar las labores

Por Enrique Gutiérrez

Tuxtla Gutiérrez

A pesar de que existe un “dictamen de riesgo” emitido por la Secretaría de Protección Civil estatal, y avalado por la misma dependencia pero a nivel municipal, el cual advierte que una obra que se construye en la colonia Los Laureles debe detenerse porque ya provocó afectaciones en viviendas de algunos vecinos, ayer quien encabeza la última dependencia mencionada, Elizabeth Hernández Borges, prácticamente “le echó la bolita” a los responsables de esos trabajos.

 

Aunque aceptó que sí hay un documento emitido por ellos, justificó que en éste sólo le deja en claro que hay afectaciones y que en todo caso la compañía responsable de esos trabajos tiene que responder por los posibles daños generados en ese sector al poniente de esta ciudad tuxtleca.

A solicitud de los colonos, recordó luego de ser abordada tras una reunión urgente en la Comisión Nacional del Agua (Conagua), acudieron a la colonia residencial para efectuar la valoración de riesgo que, en el ámbito municipal “nos compete, pero fuimos acompañados con PC del estado, ellos emitieron el dictamen de riesgos efectivamente, y hay recomendaciones”.

Según la funcionaria, como PC municipal organizaron reuniones con el director responsable de la obra (DRO) y con el dueño del predio, para que se atiendan las obligaciones que se tengan que realizar, como parte de la competencia de la Dirección de Desarrollo Urbano; “hemos tenido varias reuniones, durante las cuales estas cuestiones son atendidas”.

“Los colonos nos argumentaban que se construía un estacionamiento subterráneo, lo que se veía a simple vista, lo cual no fue así… los planos del DRO se referían a una cimentación profunda, todo el proceso estructural para el edificio; y, en la parte de las aclaraciones, procuramos tener ese vínculo con los ciudadanos preocupados por sus bienes patrimoniales”, destacó.

De hecho, Elizabeth Hernández argumentó que le han dado seguimiento al caso e incluso están atentos a alguna denuncia que efectúen los colonos para atenderlos de inmediato.

Puntualizó que sí hay un riesgo de que las viviendas aledañas incluso se desplomen, “por eso hicimos la valoración, y el acercamiento con la empresa, y en caso de alguna afectación, tiene que responder. Así se lo hicimos saber a la Secretaría de Desarrollo Urbano para que aplique el reglamento de construcción que está en el ámbito de su competencia”.

Según ella, los empresarios de dicha obra están de acuerdo con las obligaciones y reparaciones que la misma ocasione con los inmuebles aledaños, “pero la empresa tiene que atender eso”.

Sin embargo, al concluir la entrevista sobre el tema, Elizabeth Hernández le sugirió a otro compañero reportero de un conocido medio local que no publicara el tema del caso Los Laureles, para luego, a paso rápido, salir de las instalaciones del Centro Meteorológico de la Conagua, adonde acudió a una reunión con otras autoridades ante la llegada de la tormenta tropical “Adrián”.

LA OTRA CARA DE LA MONEDA

Este rotativo publicó, a mediados de marzo pasado, la denuncia de los colonos de Los Laureles, quienes evidenciaron una serie de actos de corrupción en el caso, entre éstos el permiso que se le otorga a la Empresa Panamericana de Inmuebles “Almafel SA de CV”, para que comenzara los trabajos en la avenida Hortensias, con número 279 y lote 018.

De hecho, demostraron el presunto tráfico de influencias y otras anomalías que imperan en la Secretaría de Desarrollo Urbano Municipal, al acusarla de otorgar un permiso al “fast-track” a una compañía para que construyera un edificio de cinco pisos en dicha colonia residencial, lo que según ellos atenta no sólo contra el patrimonio de cinco familias, sino en detrimento de sus propias vidas.

En esa ocasión, Martín Ramos y Juliana Matus, secretario y presidenta de la Unión de Colonos del fraccionamiento, respectivamente, advirtieron que al supuesto dueño de esos trabajos, Óscar Estrada Martínez, no le importó que a principios de marzo de este año PC municipal emitiera un dictamen, el cual establece que esa obra debe parar porque es de riesgo, es decir las casas presentan cuarteaduras y no cumple con lo estipulado en el permiso.

Lo que más les extraña, advirtieron, es que esa compañía obtuvo la anuencia de dicha área del Ayuntamiento “en una hora”, es decir que el trámite se hizo el 15 de diciembre de 2015 y al siguiente día tuvo respuesta positiva, “pero también nos preguntamos por qué hasta ahora la ejecutan”.

Los funcionarios que avalaron ese permiso, Roger González Castellanos, Mario Díaz Santiago y Liliana Gómez Bustamante, todos de la Secretaría de Desarrollo Urbano Municipal, fueron despedidos del Ayuntamiento hace poco, “pero el nuevo titular de esa instancia, José Alberto Colmenares Guillén, tampoco quiere meter las manos en el asunto, a pesar de que es de su competencia, se esconde”, dijeron.

Por su lado, en esa rueda de prensa, Martín Ramos dijo que se violaba el reglamento en el apartado que tiene que ver con la cuestión de uso de suelo, pues Los Laureles está diseñado para viviendas “H1”, “por eso nos dirigimos ahora hasta con el gobierno del estado, porque el Ayuntamiento es omiso”.

En breve entrevista, Juan de Dios Velasco Santiago, dueño de una de las viviendas afectadas por la obra, aseguró que a pesar de que “levantaron la voz” para frenarla, hasta el momento las máquinas y los albañiles continúan sus labores sin descanso; “desde las 6 de la mañana comienza, e incluso hasta los domingos, ¡y eso no se vale!”.

Externó que temen por sus vidas: “Uno se duerme pero no sabes si tu casa amanecerá parada (sic). Por eso responsabilizo a la autoridad municipal de lo que le pase a mi familia y a mí, y de los vecinos”.