Centro de Tuxtla Gutiérrez carece de botes para basura

Tuxtla Gutiérrez.- Más allá de las ofertas comerciales; popotes, platos de plásticos con desperdicio de diferentes comidas, bolsas rodando por doquier y restos de frutas y verduras echadas a perder son algunos elementos que se encuentran en las principales calles de la capital chiapaneca, sobre todo, del lado sur.

 

Ante un recorrido hecho se pudo constatar que las calles carecen de un lugar adecuado y de botes específicos para que la ciudadanía camine y deposite la basura que ha generado.

Son varias cuadras que debe circular un ciudadano para encontrar un cesto de basura y en su desesperación termina por arrojar los desechos a la calle; evidentemente, esto representa un foco de infección para quienes transitan por las aceras y establecimientos y empeora la situación en aquellos negocios donde se venden comidas, jugos o cualquier alimento que un ciudadano común pueda degustar.

Cuestionando a varios transeúntes, señalaban que muchas veces tiran la basura donde sea porque no encuentran un lugar adecuado “a veces entramos a las tiendas para eso, veo el bote dejo mi basura y me salgo sin comprar nada”, argumentó una de las personas entrevistadas. 

“Es culpa de todos, a veces barremos pero al otro día amanece sucio”, fue otra de las frases que soltó un empleado de un comercio de antojitos que, además, manifestó que barrían su banqueta por la “higiene” que debe tener el establecimiento.

Otras personas criticaban que no hay el interés debido por parte de las autoridades correspondientes para atender la situación; desde la última remodelación que sufrió el primer cuadro de la ciudad esta problemática no se ha resuelto, con ello las principales calles de la ciudad lucen más como un basurero ambulante que como una zona donde puedan encontrarse otras variedades comerciales.

 

El problema se raíz se puede dividir en tres puntos importantes; el primero, la falta de sensibilización de la misma ciudadanía tuxtleca para depositar la basura en el lugar que merece; segundo, las instancias correspondientes hacen poco o nada para mantener, por lo menos, el primer cuadro de la ciudad en mejores condiciones urbanas y, por último, la proliferación del ambulantaje ha hecho que por la tardes-noches las principales calles de la capital chiapaneca estén convertidas en un verdadero basurero donde la gente transita como si nada pasara.