Un acierto la beatificación de Oscar Arnulfo Romero: Obispo

Por Guillermo Enríquez.

San Cristóbal de Las Casas, Chis.- El obispo de la Diócesis  de esta ciudad, Felipe Arizmendi Esquivel, mencionó que al fin se aceptó que Monseñor Oscar Arnulfo Romero y Galdámez, sea beatificado por haber sido un sacerdote salvadoreño que defendió los derechos humanos de sectores desfavorecidos de este país.

“Se ha anunciado lo que por tantos años esperábamos: la declaración oficial de la Iglesia de que Monseñor  Oscar Arnulfo Romero murió como mártir, pues lo asesinaron por odio a la fe, por su servicio como obispo pastor de su pueblo sufrido y masacrado. Fue asesinado un 24 de marzo de 1980, mientras estaba celebrando la Misa, en el momento de la consagración”, sostuvo.

Añadió que durante la guerra civil de El Salvador, el clérigo siempre defendió las causas nobles de los pobres, campesinos y personas que eran excluidas y explotadas.

“Durante muchos años se pusieron objeciones a esta declaración de que murió como mártir, porque se decía que lo mataron por meterse en política, por su crítica social a los que ejercían el poder en aquellos años. Algunos defendían que no había muerto por la palabra de Dios, por la fe, por la Iglesia, sino por hablar más de la cuenta y por oponerse al sistema político imperante; por tanto, que su muerte no era por la fe cristiana”, agregó.

Mencionó que para este logro se realizó una  investigación exhaustiva sobre  la vida del prelado, vida, su predicación y  su práctica pastoral.

 “No era un político, ni un líder social que buscaba derrocar al gobierno, sino un defensor del pueblo, una voz de los que no tenían voz, un hombre de oración, un pastor comprometido con los pobres”

Refirió que el Papa Francisco aprobó el decreto por el que se reconoce la heroicidad de sus virtudes y que se le reconoce como mártir de la Iglesia lo que da paso a que sea beatificado, de la cual aún no se tiene la fecha para realizarse, pero que podría ser a través de una misa que presidiría el cardenal Ángelo Amato, Prefecto de la Congregación para las Causas de los Santos.

Para terminar, Felipe Arizmendi, dijo que no se tendrá la presencia del  Papa Francisco, quien podría realizar la canonización de este mártir, lo que sería un segundo paso luego de ser declarado beato.

“Invito a los fieles creyentes a invocar su intercesión ante Dios, para que nos conceda algún milagro, con el que Dios dé su testimonio de que efectivamente es santo para la Iglesia universal. Encomendemos en particular la paz y el desarrollo de El Salvador, a los migrantes de ese país, y también pidamos por la paz y la reconciliación en nuestras familias y en nuestra patria” concluyó.