Calles de San Cristóbal se llenan de color en tercera dimensión

Agencia

San Cristóbal de Las Casas

 

Las pinturas callejeras en tercera dimensión y la diversidad de México dejaron su huella en el Festival de Arte sobre Piso “colores de Chiapas” celebrado el pasado fin de semana en la ciudad de San Cristóbal de Las Casas.

 

“Son obras hechas para ser vistas de un punto de vista especifico y te dan una ilusión óptica, da la sensación que emergen del piso”, declaró Carlos Alberto García, portavoz de la Asociación Civil Bonbajel Mayaetik.

Alberto García, es un impulsor del arte callejero en tercera dimensión en la ciudad de Guadalajara y participante en el festival junto con otros 29 pintores, entre los que se encuentran un italiano y un holandés.

Las obras son hechas con gises de colores y para este festival el tema central ha sido la diversidad de Chiapas, tanto natural con su fauna y flora de la Selva Lacandona, como histórica por la cultura maya que se desarrolló en el sureste del país.

Las pinturas en tercera dimensión plasmadas en calles y paredes de San Cristóbal son tan efímeras como lo permite el clima y estuvieron expuestas al público todo el fin de semana.

“el público pudo ver obras con tema de biodiversidad, tridimensionales, interactivas que les permiten formar parte de ellas”, aseguró García, uno de los 30 artistas que participaron en el Festival, convocado del 17 al 20 de enero.

Con el paso de las horas y los días, las calles y paredes de San Cristóbal de Las Casas reflejaron los coloridos trabajos de los artistas frente a la expectativa de los habitantes que se acercaban con curiosidad para observarlos.

Rigoberto Gómez Santis, un pintor mexicano de la etnia indígena tsotsil, se sumó al festival con la idea de vivir la experiencia de trabajar con artistas de su país.

“Es una experiencia porque vemos el proceso y el trabajo de otros compañeros y tiene una visión diferente también, lo plasman de diferente manera y el manejo de la técnica también es muy variado”, aseguró.

Gómez considera que lo más productivo de su participación en el Festival “colores de Chiapas” es que ha podido aprender de todos los participantes mediante la observación de sus procesos.

“Me siento muy contento de poder apreciar la obra de cada uno de ellos, y poder aprender algo de esto”, destacó.

La diversidad prevalece en las obras, no obstante las preferencias de algunos pintores como Marlene Sánchez, de 19 años y originaria del estado de Tlaxcala, que ha dejado a un lado su tema preferido de la tauromaquia cautivada por los colores de Chiapas.

“Me ha conquistado el folclor, la multiculturalidad, la vibración que tiene la vestimenta, he plasmado todo lo que es la cultura chiapaneca”, sostiene la pintora.

René Linares, pintor originario de Guadalajara, aseguró que la obra que desarrolla en este festival “es un homenaje a la cosmovisión maya. Es una mujer tsotsil fusionada con un jaguar, símbolo de la cultura maya y símbolo de Chiapas”.

Para David Mata, un pintor con más de 10 años de experiencia y residente en Guadalajara, el festival en tierras de Chiapas ha sido especial por la reacción que ha tenido el público ante las pinturas.

“Es interesante y gusta mucho estar trabajando aquí pero lo mejor es cuando el público llega y empieza ajustarle la obra, es ahí cuando uno recibe lo que uno está haciendo”, manifestó Mata.