Marcelo Pérez se niega al diálogo

Abel Pérez

Simojovel

La conducta rebelde que  ha demostrado el párroco de Simojovel, Marcelo Pérez Pérez, quien en reiteradas ocasiones se ha negado a dialogar con los líderes campesinos Ramiro y Juan Gómez Domínguez, demuestra que le apuesta al desprestigio, a la calumnia, a la cerrazón y al conflicto social, pues por dos años ha usado de bandera el nombre de los Gómez Domínguez para su publicidad.

 

En una nueva misiva enviada al párroco por los hermanos Gómez Domínguez, insisten en el interés de dialogar y poner fin a la indiferencia que él ha creado y qua hecho creer entre algunos de sus seguidores, y es que consideran que su misión no concuerda con el juramento y el compromiso que realizó ante Dios hace quince años.

Expresaron la confusión del comportamiento del párroco, toda vez que como fiel servidor de Dios y que el arma más poderosa son las  palabras, se niegue a dialogar, pues cada día son más grandes sus ansias desmedidas de publicidad hacía su persona y con el hecho de no dialogar demuestra que se quedaría sin armas para publicitarse.

Resulta que ahora Marcelo Pérez en sus exageraciones y en el nombre de Dios convoca a todos los pueblos a un evento masivo, para agradecer sus quince años como fiel servidor, exigiendo excesivas cooperaciones para el festín, y para dejar constancia de su fuerza y su poder, argumenta que tendrá a más de 20 mil católicos en el ruedo, como si se tratara de un evento proselitista.

La carta firmada y sellada por la parroquia católica con fecha 13 de marzo, relata que para este evento, el párroco realizará la consagración de dos diáconos indígenas de dos comunidades de Simojovel que a decirse, ellos no caben en su papel de publicidad, pues siempre pregona que no tiene ninguna relación con políticos, pero es clara su relación con la parte oficial que incluso, la guardia personal que porta está en la nómina de la alcaldía.

Por lo tanto, los pobladores de Simojovel exhortan a Marcelo Pérez a reencontrar el verdadero camino de dios y abonar a la paz, predicar con el buen ejemplo y que para agradecer sus quince años de sacerdocio, reduzca su publicidad personal y celebre su acción de gracias en la parroquia de san Antonio, a quien le tienen amor y devoción, así también dicen que insistirán en el diálogo y pedirán a Dios le cambie su corazón.