Avanza reingeniería de Pumas

Rodrigo Ares de Parga, presidente del Patronato del Club Universidad, asegura que se han sentado las bases para que la institución vuelva a contar con una cantera exitosa

Nota y foto Excélsior

CIUDAD DE MÉXICO.

Desde su fundación en 1954 el Club Universidad ha apostado por el talento de su cantera en lugar de realizar inversiones millonarias, como lo hacen otros equipos del futbol mexicano, los cuales confían en el talento extranjero.

Dicha decisión, que en su momento fue apoyada por directivos como Guillermo Aguilar Álvarez, dio origen a que un innumerable grupo de jugadores surgidos en la institución destacaran en la Primera División, además de que alimentaran distintas generaciones de la Selección Mexicana.

El proyecto actual tiene las características de lo que hizo el ingeniero Aguilar Álvarez en su momento, pero el problema es que cuando él creo esto eran torneos largos, torneos con tres o cuatro extranjeros en los otros equipos. Hemos tenido que seguir con esa filosofía, pero adaptar esas decisiones para poder seguir compitiendo es difícil. Se complica apostar por la filosofía de generación de jugadores cuando hay otros equipos que juegan con nueve extranjeros”, comentó el directivo del conjunto capitalino en entrevista para Excélsior.

Los universitarios dejaron de producir futbolistas de calidad en los últimos años y copiaron la fórmula de otros equipos al llenar su plantilla de elementos foráneos. Se dio un paso atrás. Por eso, el cambio.

En mayo de 2016 Ares de Parga arribó a la presidencia del Patronato con la intención de terminar con esa inercia, de la mano de un proyecto que llamó ADN Pumas, el cual consiste en estabilizar las finanzas del equipo, invertir en la cantera, lograr resultados deportivos y, sobre todo, devolverle la identidad a la institución.

Lo primero es saber que pertenecemos a la máxima casa de estudios que tiene este país, que es la Universidad Nacional, la cual está entre las 100 mejores del mundo. Es la mejor de México. La mística universitaria es muy clara: garra y pelear cada balón”, describió.

En casi dos años de administración, la actual directiva auriazul ha invertido alrededor de 150 millones de pesos para mejorar las instalaciones del primer equipo y las fuerzas básicas. Va por más.

Tenemos tres personas que viajan constantemente buscando talento, pero uno de los problemas que tenemos es ¿qué vamos a hacer si encontramos un talento en Aguascalientes o en Ciudad Juárez? Contamos con dos casas club, que rentamos, muy pequeñas, con 20 camas. Necesitamos construir nuestra casa club, ya empezamos a construirla, la pensamos terminar en marzo y con esto terminaríamos el 90 por ciento de la infraestructura que necesita el club. Ya hicimos la casa del primer equipo, la cancha sintética, la Cantera 2, que la inauguraremos en tres o cuatro semanas, y estamos empezando con los dormitorios para nuestras fuerzas básicas”, compartió.

Pumas se ubica en la novena posición del torneo mexicano actualmente, pero en cuanto a infraestructura poco a poco comienza a meterse entre los líderes.

Los cimientos ya los tenemos bien hechos, ya tenemos fuerzas básicas, ya tenemos la parte financiera bien amarrada; ahora tenemos que empezar a resolver el problema de los resultados del primer equipo, de los cuales no estamos nada contentos”, confesó Ares de Parga.

El club universitario quiere reencontrarse con la identidad que lo distingue del resto. Lo hace desde sus raíces, sus fuerzas básicas, las que alguna vez vieron nacer a un joven llamado Hugo Sánchez y que ahora son la base de un ADN de sangre azul y piel dorada.