Disciplina Tuca; Ferretti, por otra semifinal

Ramón Ramírez, Claudio Suárez y Jesús Olalde recuerdan, y valoran, a las exigencias del técnico de los Tigres

Nota y foto “Excélsior”

CIUDAD DE MÉXICO.

No hay jugador que no diga que alguna vez le temió a los corajes del Tuca. La disciplina, casi militar, como dice Claudio Suárez, es su principal característica. Con el brasileño, el mínimo detalle importa: “desde llegar puntual al entrenamiento, hasta qué haces en tu tiempo libre”, explica Jesús Olalde, otro de sus exdirigidos. Después del futbol “es tu amigo, platica contigo y hasta hace bromas, pero cuando se trata de trabajo, decía que nos trataba como enemigos”, describe Ramón Ramírez, quien fue campeón con él en Chivas.

 

Tuca, de un momento a otro, pasó de ser jugador a técnico. En Pumas, en una temporada festejaba el campeonato y a la otra le decía a sus pupilos: “Como futbolista me daban mis zapes, pero como técnico ya no. Me tienen que respetar”, recuerda Suárez, quien acompañó al Tuca en sus aventuras por Pumas, Tigres y Chivas.

Debutó a Olalde en 1996 y le dijo al chamaco, que terminó como campeón de goleo tres años más tarde, “que no me pusiera nervioso. Luego pateó un balón y lo metió a portería. Me dijo: ‘así se meten los goles’. Siempre ponía el ejemplo”.

El Tuca asegura que “viste mucho hablar de mí” y hasta sus corajes se han hecho virales en las redes sociales. El técnico de 63 años se convirtió en un fenómeno de internet en 2014 con un video en el que regañaba a los jugadores de Tigres por no poder llevar a cabo una jugada y terminaba el vetusto entrenador ejecutando la acción. “¡Sesenta putos años, una prótesis, y lo hago mejor que ustedes!”, termina, entre gritos, el técnico de los felinos, luego sale de escena. Ese clip, en YouTube, supera los dos millones de reproducciones.

Sacaron un video, donde según súper regañaba a sus jugadores. Muchos se espantaron, pero eso era cada tercer día cuando nos dirigía a nosotros. Él me comentaba mucho que nosotros los mexicanos somos muy relajados, por lo que hay que estar con látigo. Tenía toda la razón. No permite que sus equipos se relajen”, explica Suárez.

El regaño del Tuca siempre era fundamentales, su expresión asusta más de lo que en realidad es. No regaña, exige, pero ejemplifica lo que quiere decir. Te sirve, porque te enseña con palabras y en la práctica”, agrega Ramírez, quien con el Tuca pasó jugar de volante por izquierda a desempeñarse como un segundo contención. 

Yo tengo una mejor (anécdota). Me acuerdo que una vez estaba en la banca, el Tuca se enojó, pateó un bote, se rompió un dedo y ni así se le bajó el coraje. Ya después vimos que iba caminando medio raro. En el momento nos dio miedo, pero después lo tomábamos hasta de broma”, recuerda Olalde, quien siguió a Ferretti en Pumas y Tigres.

Ferretti tiene dirigidos mil 17 partidos en Primera División y está a 66 partidos del récord de Ignacio Trelles. Nunca ha sido cesado y en torneos cortos ha dirigido 33 liguillas, de las cuales avanzó a 15 a la semifinal, en ocho a la final y tiene cinco títulos en sus vitrinas. En el actual torneo está al mando de uno de los favoritos a ser campeones y a un paso de las semifinales. A pesar que su equipo goleó 4-1 al Monterrey, en la ida, Tuca dijo que “todavía no es suficiente”.

Aunque pensáramos que habíamos jugado nuestro mejor partido, siempre encontraba un error. A él nunca lo vas a tener contento, siempre quiere más”, confiesa Ramón Ramírez.