Mérida de nuevo es urbe cultural
En Mérida inició en 2002 la iniciativa para designar anualmente una ciudad como Capital Americana
MÉRIDA.
La noche resulta un alivio refrescante en esta calurosa tierra. Cuando el termómetro ha descendido por lo menos diez grados centígrados, las plazas comienzan a llenarse de gente y empieza la música. El Parque de Santa Lucía de esta blanca ciudad es un referente indiscutible de la música que durante siglos ha animado a la población: ahí se celebra ininterrumpidamente, desde el 14 de enero de 1965, la tradicional serenata yucateca que suma hoy más de dos mil 500 representaciones.
Pero la del jueves pasado fue especial. Si ya los cantores de la región se han encargado de ensalzar con maestría las virtudes yucatecas, la velada se tornó en una celebración total para recordar el 475 aniversario de la fundación de la ciudad de Mérida por parte del conquistador Francisco de Montejo, ese que dio nombre a la célebre y palaciega calzada que hoy sigue presumiendo la ciudad.
En voz de los trovadores sonaron los versos de Luis Espinosa, Josefina Patrón, Armando Manzanero, Pastor Cervera o Cirilo Baqueiro. Pero la serenata de ese 5 de enero fue sólo el preludio para la gran celebración: formados sobre la Calle 60, que conduce directamente a la plaza principal de la urbe, comenzaron a reunirse más de un centenar de juglares modernos. Era casi la medianoche y el peregrinaje estaba listo.
Los miembros de las cuatro asociaciones de trovadores yucatecos: la Pepe Domínguez, la Guty Cárdenas, la Pastor Cervera y la Armando Manzanero, avanzaron cantando hasta llegar a la plaza principal, justo enfrente del Palacio Municipal, donde todos juntos entonaron Las mañanitas cuando la primera campanada de la Catedral se dejó escuchar.
URBE AMABLE
En Mérida inició en 2002 la iniciativa para designar anualmente una ciudad de la región como Capital Americana de la cultura; 17 años después, la llamada Ciudad blanca vuelve a ostentar la distinción. En el aniversario 475 de la ciudad, también dio inicio el programa cultural que se desarrollará durante todo el año con motivo de la designación que busca unificar a través de la cultura, las diferentes ciudades de Iberoamérica.
Mérida asiste a su aniversario lista para darse al mundo como un regalo”, dijo durante el acto protocolario de apertura Erica Millet Corona, secretaría del Comité Mérida Capital Americana de la Cultura 2017. Y ese fue el tono que de la ciudad quisieron mostrar sus autoridades: el de una ciudad abierta al mundo, que ha sido capaz de combinar su añeja tradición con manifestaciones modernas, una capital transitable para todos que sigue jactándose de ser la más segura de todo el país.
Mérida, agregó su alcalde Mauricio Vila Dosal, “es un ejemplo de que es posible convivir en un marco de paz social, aunque construir la ciudad no ha sido fácil”. En esta urbe de más de 770 mil habitantes, que se localiza a mil 318 kilómetros de la Ciudad de México, un solo asalto sigue siendo noticia y los automóviles pueden prescindir de alarmas de seguridad. Su tranquilidad es palpable en las calles, al menos en los principales puntos turísticos, donde cada vez es más frecuente ver visitantes extranjeros.
Esta, agregó Vila Dosal, es “la ciudad con la mejor calidad de vida de México. Una ciudad amable con todos”. Sumado a su historia milenaria y sus tesoros patrimoniales, Mérida busca volcar este año la cultura a sus calles: en total se realizarán 50 actividades específicas en torno a la designación —el Cabildo designó 75 millones de pesos—, pero, a decir de Millet Corona, la ciudad contará en 2017 con casi 12 mil actividades culturales de todo tipo, organizadas por la iniciativa pública como la privada.